Altos cargos peronistas encubrieron un atentado antijudío, según Cavallo

Domingo Cavallo, que fue superministro de Economía y diseñador del plan de estabilidad argentino hasta su destitución, el pasado año, ha disparado con munición de grueso calibre contra el Gobierno de Carlos Menem: acusa a dos ministros, al secretario general de la Presidencia y a varios altos dirigentes del gubernamental Partido Justicialista (peronista) de obstruir la investigaciones encaminadas a dar con los terroristas que el 18 de julio de 1994 destruyeron con un coche bomba la sede de la mutua judío-argentina de Buenos Aires y causaron 86 muertos y más de doscientos heridos. Según Cavallo, hubo encubrimiento judicial de los autores del atentado.

El ex ministro implicó a los titulares de Interior, Carlos Corach; de Justicia, Elías Jassan; al secretario General de la Presidencia, Alberto Kohan; al director de Migraciones, Hugo Franco, y a los embajadores argentinos en Italia, Antonio Ermán González, y ante el Vaticano, Esteban Caselli. Consecuencia de la grave acusación, el ministro de Justicia anunció ayer la presentación de una demanda judicial, junto con Corach y Kohan, ante el juez Juan José Galeano. "Le pedimos que nos considere a su disposición y que cite al señor Cavallo para que explique, de una vez por todas, de qué manera se está obstaculizando la investigación por la causa AMIA [Asociación Mutual Israelita Argentina] y que aporte las pruebas que tenga al respecto para que el juez juzgue lo necesario".El presidente Carlos Menem, que viajará este fin de semana a Estados Unidos, también descalificó sin clemencia a Cavallo en una reunión con corresponsales norteamericanos. La crispación política registrada estos días en Argentina arranca de meses atrás y tiene complejas ramificaciones. Las tempranas denuncias de corrupción de Cavallo contra jueces, periodistas o políticos de los dos principales partidos y contra el empresario Alfredo Yabrán, a quien calificó como un "rnafioso" con complicidades en el poder, cobraron nueva dimensión al quedar involucrado el denostado hombre de negocios en las investigaciones sobre el asesinato del fotógrafo José Luis Cabezas.

La nueva arremetida del ex ministro, que afronta decenas de causas en su contra por las acusaciones vertidas a diestra y siniestra, se produjo en una conferencia de prensa, convocada para responder a las páginas pagadas por el justicialismo en la prensa escrita con un rosario de imputaciones en su contra, entre ellas el haber sido funcionario de la pasada dictadura (1976-83), y el aplicar "la sistemática técnica nazi de mentir y mentir para que algo quede".

Según Cavallo, candidato en las elecciones legislativas del próximo octubre por su nuevo partido, Acción por la República, los dos ministros citados y el secretario de la Presidencia, entre otras personas, dispensan protección al empresario Yabrán. "Los mismos mecanismos judiciales que le han dado protección a Yabrán, tengo la impresión que le han dado protección a la gente que dio apoyo logístico a los que pusieron la bomba en la AMIA", sostuvo Cavallo, para quien este presunto encubrimiento es controlado por Jassan y Corach.

Piensa Cavallo que al haber hablado en EE UU sobre la corrupción en Argentina, sus enemigos "recurren al mote de nazi" para descalificarle. En su opinión, se utiliza el hecho de que tres de los denunciados son de origen judío para tildarle de "antisemita".