Arafat ordena que se investigue la apropiación de 50.000 millones de pesetas

El presidente de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat, ha decidido hacer frente a las acusaciones de corrupción contra algunos altos cargos de su Administración, y ha ordenado una profunda investigación del uso de los fondos presupuestarios. La medida se produce dos semanas después de que una auditoría revelase que 326 millones de dólares (casi 50.000 millones de pesetas) fueron desviados irregularmente del presupuesto palestino.La auditoría fue realizada por el Departamento de Control Público, establecido por la propia Autoridad Palestina, bajo la dirección de Jarar Kidueh. Según los 600 folios de que se compone, el 40% del presupuesto palestino fue "dilapidado o utilizado irregularmente", e incluso algunos ministros transfirieron donaciones internacionales a sus cuentas personales.

Fuentes de la Administración de Arafat confirmaron ayer que el informe menciona a cinco ministros de la Autoridad Palestina como "presuntamente implicados en la corrupción". El líder palestino ha ordenado la creación de una comisión de ocho miembros que investigue las alegaciones y le ha dado un mes para la presentación de un informe al respecto. Según Kidueh, "todos los ministros y altos cargos que se apropiaron de fondos serán llevados ante la justicia".

La corrupción galopante entre los altos cargos de la Administración palestina ya había sido denunciada sin éxito por organizaciones internacionales de derechos humanos y varios miembros de la Asamblea Legislativa de la autonomía. Los diputados aseguran que el dinero de los contribuyentes "se está gastando en coches de lujo y mansiones para los ministros". Según un informe anterior, algunos ministros tienen "hasta cuatro coches oficiales". Kiduah ha revelado que algunos altos cargos pasan cuentas telefónicas personales de hasta 7.000 dólares mensuales (más de un millón de pesetas). En otros casos se dejaron sin ingresar tasas y aranceles sobre automóviles importados para favorecer a "particulares amigos".

La UE, que ocupa el primer lugar entre los donantes internacionales de la Autoridad Palestina, ha pedido a Arafat que ofrezca una contabilidad más clara de los gastos de su Administración. Las donaciones internacionales, que representan el grueso de sus partidas de ingresos, ascienden a 2.500 millones de dólares (casi 362.000 millones de pesetas) para un periodo de cinco años desde el establecimiento de la autonomía en 1994.