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Medio Ambiente autoriza la caza en la zona leonesa de Picos de Europa

El Ministerio aduce "control poblacional" y de enfermedades

El organismo Parques Nacionales, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, ordenó ayer a los guardas de la zona leonesa del Parque Nacional de Picos de Europa, de forma inesperada, que se dejara de perseguir a los cazadores con autorización de la Junta de Castilla y León. La guardería del parque tenía la consigna hasta ayer de advertir a los cazadores con licencia de la Junta, que estaban cometiendo una ilegalidad

Los guardas tenían que pedir a los cazadores que se identificaran, que entregaran las armas y se les denunciaba ante los juzgados, de acuerdo a las leyes vigentes y al Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Parque Nacional (PORN), que prohíbe tajantemente la caza deportiva. Hasta el pasado jueves, los guardas eran asistidos en este cometido por la Guardia Civil.El comunicado del Ministerio, al que ha tenido acceso EL PAÍS, transige con las reiteradas peticiones de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta para autorizar la caza en el parque nacional, acogiéndose al único punto del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Parque, que permite la caza por motivos exclusivos de control de la población faunística. El escrito del Ministerio indica que estas cacerías responden a un "control poblacional" de rebecos, corzos, ciervos y jabalíes "ante los riesgos de propagación de enfermedades que afectan o pueden afectar" a esta fauna, como son la sarna y la queratoconjuntivitis.

Sin epidemias

Según varios expertos, consultados ayer por este periódico, en el parque nacional, especies como corzos, ciervos y rebecos -las más apreciadas por los cazadores, que pagan mediante sorteo o subasta ingentes cantidades de dinero- no tienen en la actualidad estos problemas sanitarios que aduce el Ministerio y la Junta de Castilla y León.

Además, no hay ninguna evidencia de que exista la sarna dentro de este recinto natural, ni ninguna otra enfermedad que pueda originar una epidemia y afectar a la fauna del parque en su conjunto. A esto se añade que aún no se ha aprobado el Plan Rector de Uso y Gestión del Parque Nacional de Picos, que sería también el que reglamentara estos controles sanitarios mediante la caza de algunos ejemplares. Asturias y Cantabria han suspendido las cacerías previstas en el parque nacional hasta que se aclare la situación.

El escrito del Ministerio hace referencia a solicitudes de la Junta para cazar dentro del parque, con fechas posteriores al inicio de las cacerías y una vez sorteadas y subastadas las piezas, que en ningún caso tienen sarna, según fuentes del parque nacional.

El Ministerio dice que la actividad cinegética es competencia exclusiva de la Junta, de acuerdo con su estatuto de autonomía, pero la Ley de Declaración del Parque Nacional de Picos establece que sea administrado por el Estado. El Ministerio ha anunciado a este periódico la salida de un decreto inminente derogando el actual Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Parque Nacional de Picos y se da un plazo de dos meses para un nuevo plan en el que las comunidades autónomas participarán en la gestión directa del parque nacional.

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