EE UU celebra a renuncia y pide elecciones

Estados Unidos aplaudió ayer la decisión del dictador zaireño Mobutu Sese Seko de dejar el poder y abandonar Kinshasa, la capital del país. Mientras que la Unión Europea acogió con "alivio" la decisión del presidente zaireño, uno de sus miembros, Francia, el principal aliado de Mobutu, fue más cauteloso. El ministro francés de Defensa, Charles Millon, mostró su esperanza y su deseo de que Zaire mantenga "su integridad territorial y se restablezca la paz civil". En términos parecidos se manifestó Bélgica, la antigua potencia colonial, que reclamó una "solución pacífica de la crisis"."Creemos que su salida abre camino a una solución pacífica al conflicto militar", dijo Madeleine Albright, secretaria norteamericana de Estado. "Zaire tiene ahora que dejar las armas y avanzar hacia la paz, la estabilidad y las elecciones", añadió. "Esas elecciones deben ser libres y limpias".

El presidente norteamericano, Bill Clinton, declaró: "Haremos lo que podamos para apoyar a África". Clinton instó al mundo a respaldar el "excelente trabajo" del líder surafricano, Nelson Mandela, para resolver el conflicto.

"Nuestra posición está clara", señaló Bill Clinton, "queremos ver una transición a una democracia auténtica" en Zaire, "uno de los países más grandes e importantes de África".