Los dentistas se niegan a que el paciente contrate directamente con el protésico

Como toda batalla en la que se libran muchos interés económicos, ésta es a cara de perro. Los dentistas no están dispuestos -pese a una reciente sentencia del Tribunal Supremo que se pronunció a favor- a que el paciente elija, contrate y pague directamente al protésico sus honorarios.El Consejo General de Colegios y Odontólogos y Estomatólogos de España, que respondió ayer diciendo que el fallo judicial no crea jurisprudencia, advirtió de que si el paciente entra en relación directa con los protésicos también los dentistas irán a los tribunales. "No vamos a consentir que el paciente imponga su protésico. Eso sería un peligro público", dijo ayer el presidente del Colegio de Odóntologos de España, Manuel Alfonso Villa.

Los odontólogos temen que se abra la veda para que los protésicos sean quienes coloquen las prótesis al paciente, labor para la que, según los dentistas, los protésiscos no han estudiado. "No sólo es inviable, sino que va contra la la salud pública y la ley7, advirtió Villa. "Esos profesionales elaboran las prótesis conforme a las indicaciones y prescripciones de los médicos odontólogos o estomatólogos". Villa avisó de que este debate está siendo azuzado por un sector mínimo de protésicos, "que no tiene apoyo entre la mayoría y entre los que se encuentra alguno que ha tenido problemas con la justicia y ha sido condenado por intrusismo profesional. No se identifica, pero yo le conozco".

Factura

Villa, que dijo no oponerse a que en la factura del odontólogo se detalle el importe de la prótesis, defendió el derecho de los dentistas a contratar al protésico: "Una prótesis dental requiere un trabajo de cirugía. ¿Y quién responde de que el paciente tenga afecciones o incluso llegue a un cáncer? Puesto que por los errores del protésico responde el dentista, éste tiene derecho a elegir su protésico de confianza".

Juan Antonio López, presidente del Colegio de Odontólogos de Madrid, expresó su derecho a rechazar a un paciente que exija un protésico concreto. "Yo me puedo negar, como dentista, a trabajar con un protésico en el que yo no confíe", señaló.

Al referirse a la sentencia, el letrado del Consejo General de Odontólogos, José María Buxeda, criticó al Tribunal Supremo y diferenció entre el argumento y el fallo de una sentencia. "El argumento de la sentencia no crea jurisprudencia, sólo el fallo. Lo único que dice es que el artículo de los Estatutos de Prótesicos de Cataluña es válido. No zanja una cuestión como la libre elección de protésico por parte del paciente". '

En concreto, sobre el argumento de la sentencia, que indica que "el usuario de la prótesis tiene derecho de conocer y abonar directamente al protésico dental el importe de sus honorarios" el Supremo, en opinión del letrado del Consejo, "se extralimita. Es totalmente desacertada esta cuestión y no es lo que se le pedía al Supremo".

, Sobre el aspecto económico, las cifras bailan entre lo que dicen algunos protésicos que cuesta su trabajo y lo que finalmente factura el dentista. "Si alguno dice que cuestan 7.000 pesetas, se las encargo todas porque a mí me cuestan él doble", dijo Villa. "No, acepto que el protésico diga que yo gano 30.000 pesetas por su trabajo. Y si me manda una prótesis impresentable y hay que repetir, ese coste sobreañadido lo paga el paciente". Y, tras reconocer que algunos odontólogos rascan en demasía el bolsillo del paciente, detalló: "De 45.000 pesetas que cuesta un pieza de porcelana, 15.000 corresponden al protésico y el resto son los honorarios de trabajo de cinco horas del dentista. Mis honorarios salen más baratos que el del fontanero", concluyó Villa.