Francia facilitó ayuda militar encubierta al líder zaireño

Francia ha llevado a cabo una operación militar encubierta para sostener al presidente de Zaire, Mobutu Sese Seko, mientras los rebeldes avanzaban a través del país, según informes de los servicios secretos estadounidenses y el responsable de una compañía que el espionaje francés usó como cobertura. El Gobierno francés ha desmentido cualquier vinculación con el asunto. La operación, que comenzó pocas semanas después del estallido de la rebelión, incluía la entrega de tres aviones de combate procedentes de Yugoslavia para las fuerzas de Mobutu, junto con los pilotos y los mecánicos necesarios para su mantenimiento. Además, según los mismos informes, a principios de enero, se sumaron los servicios de 80 mercenarios, en su mayoría serbios, aunque también había belgas y franceses.

No se ha podido determinar si la operación sigue todavía, pero los aviones y sus tripulaciones aún están en Zaire, según una fuente de Estados Unidos. De acuerdo con especialistas en operaciones encubiertas de ese país, sería muy difícil cortar esa operación de forma inmediata.

Hace unas pocas semanas, las fuerzas gubernamentales de Zaire recibieron cinco Mig-21, que, según un diplomático occidental, provenían de la ex Yugoslavia, aunque la fuente desconocía quién los había pagado. Un portavoz del Ministerio francés de Asuntos Exteriores, Jacques Rummelhardt, ha negado que su Gobierno esté implicado en ninguna operación encubierta en Zaire, o con Geolink, una compañía que los informes de espionaje mencionan como parte de esta operación en el país africano. "Francia condena cualquier actividad mercenaria en Zaire", manifestó el portavoz.

La participación de Geolink, una empresa de telecomunicaciones con sede en París y que ha vendido sistemas telefónicos de alta seguridad tanto al Gobierno zaireño como a los rebeldes que lo combaten, ha sido confirmada por André Martinie, uno de sus responsables.

Según Martinie, uno de los fundadores y directores de Geolink, Philippe Perrette, ha estado trabajando durante mucho tiempo para el espionaje francés sin el conocimiento de la compañía, por lo que hace 10 días rompieron sus relaciones con él.