Manolo Cortés: "Hoy me juego mi última temporada"
Manolo Cortés ostenta una marca prestigiosa: es el torero en activo que más ha toreado en la Maestranza después de Curro Romero. Inicia su 30ª temporada, nació hace 48 años en Gines (Sevilla) y es torero de temple y sentimiento. Tomó la alternativa el año 1968 en Valencia de manos de Antonio Ordóñez y, desde entonces, con altibajos, ha contado con el reconocimiento de los aficionados por sus cualidades artísticas.
Éste es el año de su retirada, el de su despedida de la Feria de Sevilla, a la que ha acudido en 26 ediciones. Pero Cortés sueña con que la corrida de esta tarde no sea la última en la plaza sevillana. "Hoy es un día muy especial en mi vida como torero", dice, "porque digo adiós a esta feria que tiene tanto significado para mí, pero mi ilusión sería volver al final de la temporada para matar en este ruedo mi último toro".
Ésa es su ilusión pero es consciente de que todo dependerá de lo que ocurra hoy. "Ciertamente me juego la temporada en Sevilla y Madrid", reflexiona el torero, "y espero que me acompañe la suerte, que los empresarios demuestren la sensibilidad necesaria para que pueda despedirme en las plazas importantes donde mi toreo ha dejado huella".
Sea como fuere, quizá como una prueba ante sí mismo, Manolo Cortés espera que su actuación de hoy ponga broche de oro -a su larga carrera. "Lo voy a intentar con todas mis fuerzas", afirma, "y son muchas las razones que tengo para ello; la más importante es que estoy en Sevilla, una plaza en la que no he tenido suerte y que me ha visto sólo a medias".
Baches
A pesar de su mala suerte, Cortés reconoce que ha mantenido una relación muy cariñosa con la afición sevillana y que él mismo ha sido culpable de que el éxito no le haya acompañado con más asiduidad. "He tenido mis baches", afirma, "épocas en las que no he estado bien y otras veces han sido los toros o los despachos los que me han impedido la continuidad".La falta de continuidad ha determinado la carrera de Manolo Cortés. "Para mantener el sitio en la plaza", explica, "es imprescindible no quedarte parado y yo me he quedado a pesar de haber obtenido grandes triunfos".
El toro de ayer y de hoy sigue siendo la preocupación de Cortés: "Yo soy un perjudicado por el toro actual porque es un animal grande, alto y no se mueve, y si el toro no tiene movilidad no es posible la emoción".
Cortés afirma que nunca perdió la esperanza ("He consagrado al toro toda mi vida") y que seguirá en la fiesta, quizá como apoderado, cuando se corte la coleta. Su sueño sería que fuera al final de la temporada en la Maestranza.
La corrida de hoy, 4ª de la Feria de Sevilla: toros de Fermín Bohórquez para Manolo Cortés, Fernando Cepeda y Vicente Bejarano. A las 18.30.
Babelia
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