El presidente catalán dice que anticipará las elecciones si se produce un "desacuerdo importante" con el PP

Si hay adelanto de las elecciones autonómicas, no será por sorpresa. Jordi Pujol insistió ayer en que no puede descartar del todo que algún "desacuerdo importante" con sus aliados del Partido Popular (PP) le obligue a adelantar las elecciones catalanas. También repitió que no es su voluntad ni su deseó. Pero demostró que se toma en serio esa posibilidad concentrando sus ataques a los socialistas en la persona de Pasqual Maragall, el hipotético rival que según los sondeos podría ganarle las elecciones, en un acto celebrado anoche en Nou Barris.Los socialistas no han decidido aún qué rival presentarán contra Pujol en las próximas elecciones, pero Pujol sí parece tenerlo claro. Cuando de atacar a los socialistas se trata, no se dirige contra Joaquim Nadal ni Narcís Serra. Incluso se le escapa algún elogio a Felipe González. Ayer, en un discurso de claro tinte populista y electoral, en pleno corazón del vivero de votos del PSC en Barcelona, criticó sin piedad a Maragall tanto como alcalde de la ciudad como en su condición de dirigente socialista.

El presidente reiteró los argumentos esgrimidos anteayer para explicar que existe la posibilidad de un adelanto electoral. "No quiero que las elecciones catalanas queden encajonadas entre las municipales y las españolas", reiteró. Por otra parte, agregó, no se sabe qué puede pasar dentro de un año. "Pero pueden pasar cosas y, como no tenemos mayoría absoluta en el Parlament, el PP podría dejarnos en minoría".

Las cosas que podrían pasar quedaban así vinculadas a la relación con el PP, de la que no formuló ninguna valoración, y a las decisiones que éste pueda adoptar. Pujol insistió, no obstante, en que si se produjera un adelanto, "por honestidad avisa ría con tiempo suficiente". Y añadió, en un mensaje que parecía también dirigido a los socialistas: "Estad tranquilos, no sería una decisión tomada por sorpresa. Que nadie cambie su ritmo de trabajo. Que vaya haciendo y haga lo que tenga que hacer. Nosotros tampoco tenemos que cambiar de ritmo". Pujol recordó que cuando forzó el adelanto de las últimas elecciones legislativas lo hizo pactando el calendario electoral con el entonces presidente del Gobierno.

Además de las consideraciones sobre el calendario electoral y los ataques a los socialistas, Pujol formuló una encendida defensa del pacto con el PP.