Interior centra la investigación del 'caso Elejalde' en las dos primeras horas de la detención

Los datos recopilados por el comisario Jesús Caballero Gallego, designado por Interior para investigar el caso del etarra, Fernando Elejalde, capturado el martes tras el asesinato de Javier Gómez Elósegui, reiteran que no hay indicios de que éste fuera maltratado en la comisaría de San Sebastián. Las lesiones que presenta serían fruto de una captura violenta. Elejalde, sin embargo, declaró ayer al juez Javier Gómez de Liaño que su apresamiento fue "totalmente pacífico" y que sus lesiones se deben a la, tortura que sufrió durante las dos horas que mediaron hasta su traslado a la casa de socorro, las dos horas en las que Interior centra su investigación. El Gobierno estudia destituir al gobernador civil de Guipúzcoa, Ángel Goya.

La cúpula de interior estuvo reunida todo el día de ayer en el Ministerio preparando la comparecencia del ministro, Jaime Mayor Oreja, mañana en el Congreso. El contenido del informe está bajo estricto secreto. Fuentes policiales señalan que el comisario Jesús Caballero no ha encontrado indicios de que el etarra fuese torturado en la comisaría donostiarra, aunque las pesquisas se centran en aclarar todo lo ocurrido en las dos primeras horas desde la captura.El juez tomó declaración durante durante dos horas a Elejalde, internado en el hospital madrileño Gregorio Marañón. Después, levantó su incomunicación y decretó su prisión incondicional, aunque permanecerá hospitalizado hasta mañana o pasado. Los abogados del etarra, acusado de asesinar al psicólogo penitenciario Francisco Javier Gómez Elósegui, le visitaron durante media hora. A continuación confirmaron que se encuentra totalmente "consciente y lúcido", aunque también "morado" y con numerosos golpes en los ojos, la espalda y los brazos.

Elejalde, que también conversó 45 minutos con su hermano Javier, negó a sus defensores, Ainhoa Baiglieto y Aitor Ibero, que su captura se produjera con violencia y, contra la versión policial, precisó que sufrió malos tratos en la comisaría.

"Detención pacífica"

El activista admitió a sus abogados que el martes, cuando huía, un coche que circulaba a escasa velocidad le atropelló, y en la caída se provocó heridas en la palma de la mano al rozar el asfalto. Pero desmintió a la policía en los demás extremos. Según Elejalde, su detención fue "totalmente pacífica" y arrojó su arma al suelo justo antes de ser apresado. El etarra apuntó que durante el traslado tampoco recibió ningún golpe. Según su versión, fue en la comisaría, en los dos días posteriores, donde le propinaron golpes en los interrogatorios.A Elejalde, según dijo la letrada Baiglieto a Servimedia, "empezaron a pegarle desde que es detenido y trasladado a la comisaría, antes de que sea llevado a la casa de socorro", aunque el maltrato continuó en los interrogatorios posteriores. La abogada explicó así las lesiones en la espalda: "Le ponían de rodillas. contra una persona, y le daban golpes con algo que desconoce". Fuentes de la investigación, sin embargo, aseguran que Elejalde no presenta ninguna marca en la espalda y que si hubiese recibido algún golpe contundente en la zona lumbar éste tendría que haber producido necesariamente hematomas. Estas fuentes atribuyen la fractura de las apofísis a una violenta contracción de músculos.

Los médicos del Gregorio Marañón reconocieron al herido y ratificaron que las lesiones que padece son las mismas que se le diagnosticaron el jueves en el hospital Nuestra Señora de Aránzazu. El parte de este centro, aunque más detallado y profundo, coincide con él de la casa de socorro de San Sebastián dos horas después de su detención.

Gómez de Liaño, que se trasladó al hospital con el fiscal Ignacio Gordillo y la forense de la Audiencia, tomó declaración al etarra tras recibir estos informes. Después, decretó su prisión incondicional por los delitos de asesinato, asesinato frustrado, tenencia ilícita de armas y pertenencia a banda arma. Elejalde confesó haber matado al vendedor de bicicletas Eugenio Olaciregui, el 30 de enero, y al psicólogo de la cárcel de Martutene Francisco Javier Gómez Elósegui, al que el comando Donostia seguía desde 24 horas antes.

Los informes clínicos de Madrid, que Gómez de Liaño dejó custodiados en el hospital, ratifican el diagnóstico de Nuestra Señora de Aránzazu, según fuentes próximas a la investigación, declarada secreta por el juez.

En el Gregorio Marañón, Elejalde fue examinado por oculistas, otorrinos y traumatólogos, y se le volvieron a realizar radiografías.

El Gobierno se plantea destituir al gobernador de Guipúzcoa, Ángel Goya, al considerar que le "faltó agilidad política" y que no tuvo puntualmente informado al ministerio de todos los detalles e incidentes surgidos a raíz de la detención de Elejalde, según fuentes policiales.

El comisario jefe accidental de San Sebastián, Emilio Monge Ruiz, también será previsiblemente destituido y, además, expedientado por sus declaraciones de ayer a El Mundo: "He pasado al Ministerio mucha más información de la que debía. Que Dios ampare a estos políticos de Interior si comienzan a mover las piezas antiterroristas".