La comunidad internacional, desconcertada, se plantea una masiva operación de evacuación

La comunidad internacional reaccionó ayer con unánime "preocupación" por los sucesos de Albania. Desde el completo desconcierto sobre cómo manejar un conflicto armado carente de bandos establecidos y de interlocutores identificables, empezó a evaluar posibles intervenciones militares. De momento, muy limitadas a la cobertura de eventuales operaciones de rescate o repatriación de los extranjeros. Italia, Grecia y EE UU han sido los más activos sobre el terreno. Helicópteros del Ejército italiano evacuaron a 400 extranjeros (330 de ellos, italianos), al estar inutilizado el aeropuerto de Tirana.

Grecia, que tiene a 25.000 ciudadanos en el sur de Albania, envió un dragaminas al puerto rebelde de Saranda, para atemorizar a los saqueadores. Y EE UU puso en estado de alerta a su Marina estacionada en el Adriático, tras haber ordenado a sus 160 diplomáticos y empleados y a sus 2.000 nacionales que abandonasen el país, lo que no pueden hacer por el colapaso aeroportuano,Al tiempo , la actividad diplomática alcanzó niveles febriles. El comité político de la Unión Europea (UE) y los embajadores de la OTAN celebraron sendas reuniones de urgencia, mientras las presidencias de la UE, de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) y la Casa Blanca mantenían intensos contactos para hallar una fórmula de contener la crisis. Hoy se reunirá la permanente de la Unión Europea Occidental (UEO) y mañana los ministros de Exteriores de la UE.

Aparte de las declaraciones de rigor de estos organismos invitando al diálogo y la paz, y alertando de que siguen de cerca el tema, la máxima intervención contemplada a corto plazo se limitaba a la cobertura de una operación de rescate. Alemania y el Reino Unido propusieron a los Quince ir más allá. Pero la UE no dispone de tropas. La UEO en proceso de refundación, apenas. Y los embajadores ante la OTAN no ocultaban su escepticismo "ante esta nueva patata caliente", según testimonios de su reunión. Parece que todos esperan a que la caótica situación se decante, mientras dilucidan si es la ONU quien debe emitir un mandato de actuación, o basta con la OSCE o un grupo de países afectados. Por suerte, esta vez y a diferencia de Yugoslavia, entre los europeos sólo hay matices, no fisuras", relató Ramón De Miguel, secretario de Estado español para la UE.

En Madrid, un portavoz de Exteriores, dijo que España está dispuesta a participar en una operación militar para restaurar el orden en Albania si así lo deciden los aliados. En Albania hay, al menos, cinco españoles. Ayer, tres abandonaron el país en coche.