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Boicoteo argentino a "Evita"

El estreno de la película de Alan Parker provoca una protesta social

Eva Perón ha regresado a Argentina. Y lo ha hecho vestida de reina del celuloide. Una película, Evita, de Alan Parker, basada en en la ópera-rock homónima de Tim Rice y Andrew Lloyd Weber, ha conseguido despertar los mismos sentimientos extremos que la auténtica Eva Perón. Unos, muy pocos, aplauden el filme sin importarles en exceso las inexactitudes históricas. Otros, bastantes, arremeten ruidosamente contra la profanación de una imagen legendaria. Un icono del peronismo y de los años del populismo argentino de Juan Domingo Perón. Los más callan o se esconden en una sociedad que no olvida, su pasado."Esto no tiene nada que ver con la realidad" , asegura enrabietado Enrique Oliva, el historiador que estuvo más de tres horas reunido con Madonna, la estrella que da vida al personaje, narrándole con detalle la vida de Eva Perón. "Pensé que la película iba a se un homenaje a sus méritos. Y esto es una serie de increíbles insultos y ofensas. La verdad, no lo esperaba".

Algunos críticos no son mucho más generosos: "Es una película mediocre", dice Osvaldo Quiroga, de la Cronista Comercial. "Es una gran ofensa a la figura de Eva Peron. Está mal interpretada. Es superficial. Está vacía de contenido". Pero, no todos son tan duros. Algunos aprecian cualidades artísticas en Madonna o en Antonio Banderas, que interpreta la figura del Che Guevara, y no se detienen en exceso en los aspectos históricos. Es el caso de Antonio Carrizo, un popular presentador de la televisión argentina. "En apariencia es un filme histórico, pero sólo en apariencia. Como película no está mal?''

El estreno de la famosa cinta, el lunes por la noche, se presentó en Buenos Aires con la pompa de Hollywood: alfombra roja, focos, flashes, gritos... No había clac contratada ni entusiastas seguidores. Muchos aprovecharon los focos para gritar su descontento. "¡Viva Evita! ¡Fuera Madonna!", rezaba una de las pancartas más exaltadas. Los invitados especiales, críticos de los medios de comunicación sobre todo, entraban de puntillas. Sin hacer apenas ruido, rodea .dos de una nube de fotógrafos de las revistas del corazón . y cámaras de los canales televisivos. No todos los invitados aceptaron la cortesía. Algunos de los rostros más famosos de la pantalla argentina excusaron su presencia. Amenazas telefónicas y verbales lograron extender el temor a una algarada. Entre el público se podía ver a bandas de chiquillos, ésas que todos los días rastrean las bolsas de basura del centro de la ciudad en pos de una sorpresa. Esta vez no buscaban restos olvidados, esta vez buscaban un pedacito de fama,

La rueda de prensa que Alan Parker, el director de Evita, concedió antes del estreno no fue menos intensa y ruidosa. Los reporteros. presentes en el evento se aplaudían o silbaban con entusiasmo en función de su apego al fondo de la pregunta. Parker defendió su trabajo con ahínco y calificó de "menores" las inexactitudes históricas que se hayan podido cometer. Rechazó las palabras de Carlos Ruckauf, vicepresidente de la nación, que hizo un llamamiento al boicoteo de la película porque ésta, en su opinión, denigra la figura de Eva Perón. "No hay que ver Evita para que Parker no se llene los bolsillos de dinero", dijo el político. Parker le tildó, sin rodeos, de "ignorante", pues ni siquiera vio la cinta. El medio centenar de exaltados que gritaban en los aledaños, del cine tampoco la vieron, pero ya tienen su opinión formada. Son miembros del denominado Comando de Organización del Movimiento Nacional Peronista. La Confederación General del Trabajo (CGT), el mayor sindicato argentino, cuyos dirigentes pertenecen al peronismo, tampoco perdieron la oportunidad para emitir un comunicado en el que afirma que "la abanderada de los humildes resulta una vez más agraviada, esta vez en forma de filme". Una ex dirigente del sector femenino del peronismo llegó a iniciar una querella contra el presidente argentino, Carlos Menem, por considerar que éste no cumplía con su "obligación". de preservar el patrimonio Cultural del país al permitir el rodaje.

La película de Parker, que se exhibirá en salas comerciales a partir del jueves, es motivo de intensas discusiones en sectores sociales y políticos de este país debido a que la imagen de Evá Perón es venerada en amplios sectores populares. Evita, que murió de un cáncer en 1952 a los 33 años, tuvo una activa participación en el campo Social mientras fue primera dama de- Argentina, lo que, le hizo ganarse la denominación de "abanderada de los humildes".

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