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Patronal y sindicatos se dan dos semanas para resolver discrepancias sobre la reforma laboral

Las negociaciones entre la patronal y los sindicatos sobre reforma del mercado laboral siguen en el mismo punto de hace dos semanas. Se mantienen las discrepancias y las propuestas de cada parte, que rechaza la otra. Ayer, sus principales dirigentes, José María Cuevas, Antonio Gutiérrez y Cándido Méndez, decidieron darse dos semanas de margen para intentar resolver sus diferencias. Cuando se cumpla ese plazo, analizarán sí es o no posible un acuerdo. No trataron el ultimátun de José María Aznar para que concluyan las negociaciones. Pero Gutiérrez le lanzó este consejo al jefe del Gobierno: "Que se ocupe de una política económica que no destruya empleo, como reflejan los datos de enero, y nos deje negociar".

, Los representantes de la patronal CEOE-CEPYME y de los sindicatos CC OO y UGT dedicarán las dos próximas semanas "a realizar un esfuerzo de síntesis" sobre las propuestas de ambas partes. Según explicó Cuevas , ya tienen "identificadas las discrepancias y ahora hay que encajarlas en las propuestas del otro".La patronal sigue manteniendo su fórmula de contrato de larga duración (hasta 10 años) para la inserción laboral de los Jóvenes y con una indemnización por despido de 20 días por año trabajado si se rescinde antes de ese plazo. Sobre la clarificación de las causas del despido, propone una indemnización menor de 45 días por año trabajado en los casos en qué el empresario no demuestre ante el juez que hay causas objetivas.

Los sindicatos, a su vez, han lanzado una contrapropuesta en materia de contratación. Se trata de un contrato formativo de entre dos y cuatro años para menores de 27 años y con garantías de que a su término no se rompe la relación laboral.

Sobre despidos, UGT y CC OO están dispuestos a clarificar las causas, en línea con la doctrina Fijada por dos sentencias del Tribunal Supremo. En ellas se refleja que no es preciso que la empresa esté en crisis irreversible para poder aplicar despidos objetivos, pero sí se determina que la empresa debe de mostrar la situación de crisis.

Informe del comité

Los representantes de UGT y CC OO plantean, además, la participación de los representantes de los trabajadores en los despidos individuales. Una propuesta rechazada de plano por los empresarios, aunque puede haber una posibilidad de acercamiento si se acepta que a la documentación que se remite al juez en la justificación del despido se adjuente un informe del comité de empresa sobre la situación real de ésta.En suma, ninguna de las dos partes ha aceptado las propuestas del contrario. Cándido Méndez aseguraba ayer: "Las diferencias son importantes y sustantivas. Las coincidencias son genéricas". Éstas últimas las resumió en "mejorar el mercado de trabajo, precisar las causas de la extinción de contratos y reforzar la, negociación colectiva". Muy poco más de las conclusiones a que llegaron en diciembre pasado, cuando cerraron el diagnóstico sobre los males que aquejan al mercado de trabajo.

Pese a esas discrepancias, los tres dirigentes ratificaron que van a proseguir el diálogo con el mismo compromiso de intentar llegar a un acuerdo. Y siguen rechazando presiones. Antonio Gutiérrez afirmó: "O firmamos un buen acuerdo o no firmamos nada; mucho menos atendiendo a presiones de nadie, aunque sean del señor Aznar".

Las últimas declaraciones del presidente del Gobierno urgiendo el fin de las negociaciones han pesado poco en la reunión de ayer. José María Cuevas aseguró que "ni se ha hablado de ellas". Gutiérrez lo ratificó con esta apostilla: "Tenemos muchas cosas serias entre manos para comentar ligerezas de otros, por muy presidente del Gobierno que sea".

Pero los líderes sindicales no disimularon su rechazo y malestar en las declaraciones posteriores a la reunión. El secretario general de UGT, tras asegurar que no se deja "impresionar por el señor presidente del Gobierno", le sugirió que "cumpla con su deber de aprovechar el buen momento económico, orientando su política a crear empleo y a desarrollar una ofensiva de mayores inversiones".

Para el líder de Comisiones Obreras, las declaraciones de Aznar del pasado miércoles constituyen "una nueva torpeza". Y también dijo sobre el jefe del Ejecutivo: "Sabía que la negociación está difícil y lanzar esa velada amenaza ha entorpecido las cosas. Que se ocupe de una política económica que no destruya empleo, como reflejan los últimos datos de paro, y nos deje a nosotros negociar".

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