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Guardas forestales de Rascafría denuncian amenazas de muerte

, El representante en el sindicato Comisiones Obreras de los guardas forestales de la región, Javier Díez, denunció ayer las amenazas de muerte que según él reciben "constantemente" los nueve guardas forestales encargados de velar por el cumplimiento de la legislación medioambiental en Rascafría (1.461 habitantes).

"A uno de los guardas le colgaron un gato muerto en la puerta de su casa. Otro ha recibido llamadas en las que alguien le decía que si aparecía por una montería que iban a celebrar al día siguiente se le podía escapar un tiro. A algunos les han llegado a apoyar la escopeta en la barriga", precisó Diez.

Como consecuencia de estas amenazas, "algunos de los guardas han tenido incluso que cambiar su número de teléfono o mudarse de casa simplemente porque a los vecinos de Rascafría no les gusta que cumplan con su trabajo denunciando a muchos de ellos por caza furtiva, tala incontrolada y sin permiso, vertidos ilegales en el río o construcciones en suelo rústico", añadió Díez.

Javier Diez contestó así a las acusaciones de "persecución y acoso policial a los vecinos" que realizó el alcalde de la localidad, Juan Antonio Velasco, contra los guardas en un bando. El texto incluía un llamamiento a sus administrados para que no entreguen "documento o papel que les sea requerido por esta minoría forestal".

"El texto nos parece imprudente porque invita a una rebelión de los vecinos amparada por el alcalde, lo que podría poner en peligro nuestra seguridad y provocar que se pasara de las amenazas a las agresiones físicas", destacó el representante laboral. Exigió "una rectificación y una disculpa pública" del alcalde de Rascafría.

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