Cultura y Frühbeck de Burgos intentan que la Orquesta Nacional pase al Real

Rafael Frühbeck de Burgos ha llegado a un acuerdo de principio con el Ministerio de Educación y Cultura para incorporarse como director titular a la Orquesta Nacional de España (ONE) y, al mismo tiempo, para que esta formación combine su actividad con la de conjunto estable del Teatro Real en 1998 o 1999. Frühbeck de Burgos criticó ayer el que la Comunidad de Madrid boicotee en el patronato del Real este acuerdo, mientras que Tomás Marco, desde el ministerio, consideró tales apreciaciones como '"absolutamente prematuras".

"En mis conversaciones, tanto con la ministra de Cultura y el secretario de Estado como con el directo general, hemos llegado a un acuerdo de principio", manifestó Frühbeck de Burgos en referencia a Es peranza Aguirre, Miguel Ángel Cortés y Tomás Marco, respectivamente. "Ahora tiene que decidir el Patronato que rige el Real. Por lo que he podido saber extraoficialmente, los representantes de la Comunidad de Madrid se oponen a esta idea y no creo que prospere. Espero una respuesta".Tomás Marco, director general del Instituto de las Artes Escénicas y de la Música, criticó el apresuramiento de Frühbeck de Burgos al pronunciarse sobre un asunto en el que confluyen diversos intereses. Declaró que la reconversión de la ONE requiere un acuerdo del patronato del Real y que el tema no ha sido puesto aún sobre la mesa. Confirmó el principio de acuerdo con Frühbeck de Burgos, pero matizó que el proceso será complejo y que "en su cima la decisión es política y depende de la ministra y del presidente de la Comunidad de Madrid".

La negociación con la ONE, que exige un cambio de estatutos y la redacción de un decreto, "llevará como mínimo dos años", según Marco, quien aseguró que los músicos de la orquesta -funcionarios que han protagonizado- numerosos conflictos con el ministerio-, "están dispuestos a hablar".

Entretanto, y según el proyecto del ministerio, la Sinfónica de Madrid ocuparía el foso del Teatro Real -que se abrirá en octubre de este año como teatro de ópera tras una renovación que ha costado más de 20.000 millones de pesetas-. En otro frente, los músicos de la Sinfónica negocian con el director artístico del Real, el francés Stéphane Lissner, los términos del acuerdo, tras un primer contacto que terminó con serias desavenencias.

Durante las negociaciones han surgido comentarios sobre una posible rescisión del contrato de Lissner, firmado por seis años y cuya ruptura supondría una fuerte indemnización económica (rumores desmentidos por el ministerio).

Frühbeck de Burgos relató ayer que en los últimos años algunos profesores de la ONE han venido repetidamente a pedirle que acepte de nuevo la titularidad de la misma. "Aun en la anterior administración, el señor Cervera, entonces gerente, me hizo una oferta oficial", señaló. "Siempre he contestado que no por las siguientes razones: para que la ONE adquiera la categoría que tenía en mis años de titularidad [entre 1962 y 1978], no bastaría sólo mi trabajo, sino contratar a los mejores directores como invitados -en estos momentos, los Maazel, Mehta, Muti, etcétera, vienen con sus propias orquestas, no con la ONE como hacían antes-. Esto, en el Auditorio y en las condiciones en que está la ONE, es imposible".

Dirección combinada

"A principios. de temporada, el director general del INAEM, Tomás Marco, me ha ofrecido la titularidad de la orquesta combinada con la del Teatro Real, cuando la orquesta pase al mismo, en el año 1998 o 1999", añadió el director. "Esta posibilidad ofrece mayores perspectivas, ya que da a la ONE una nueva motivación al tener que hacer un repertorio que no es el suyo, tanto en ópera como en ballet, y le permite prepararse para el siglo XXI, en donde los modelos de grandes orquestas no van a ser los tradicionales. Los conjuntos que sobrevivirán en el futuro serán siempre aquellos que se sepan adaptar a todo tipo de programación -ópera, ballet, festivales, grabaciones, etcétera"-.

En opinión de Frühbeck de Burgos, al amparo del Teatro Real, "y si éste tiene éxito, se podría contratar para la serie sinfónica -que tiene que ser importante- a directores que, combinados con la ópera, podrían ser los mejores. También para el Ministerio de Cultura es una buena solución. Da una nueva tarea artística a una orquesta que en estos momentos cuesta alrededor de 1.500 millones anuales y se ahorra la orquesta y el director del Real. Cuando se me hizo la propuesta, lo primero que advertí es que había que contar con los profesores de la ONE. El ministerio lo está haciendo y la orquesta en principio ha dicho que sí".

El director explica que se le ha ofrecido también la dirección musical de la inauguración del teatro. "He puesto en conocimiento del director del INAEM, para que también lo pase al patronato, mi total desacuerdo con la idea de que La vida breve en solitario inaugure el Real", señaló. "Es absurdo", añadió en referencia a la duración de poco más de una hora de la obra. "También aquí espero una respuesta".

"En todas las conversaciones", concluyó, "he puesto de relieve que hay que tener exquisito cuidado en no lesionar los intereses legítimos de otros conjuntos, Sinfónica de Madrid a la cabeza. Que el Real siriva para crear, no para destruir".

El director burgalés es titular de la ópera de Berlín hasta agosto, y de la Orquesta de la Radio de Berlín hasta 1999. Con el fin de año concluyó su etapa al frente de la Sinfónica de Viena.