Chalecos antibalas agujereados
La policía sospecha que los cuatro delincuentes que asaltaron el Banco Santander de Córdoba han perpetrado durante 1996 al menos otros seis golpes en Zamora, Albacete y Salamanca. En ninguno tuvieron grandes problemas ni hicieron uso de sus armas. Pese a eso, preferían actuar equipados con chalecos antibalas de fabricación extrajera, de gran calidad y resistencia.El miércoles pasado, al menos tres de los criminales salvaron la vida gracias a vestir chalecos blindados,durante el tiroteo con la policía. Tres de estas prendas presentan impactos de balas, que, de no haberse estrellado contra esa protección, habrían causado gravísimas heridas a sus usuarios.
La policía está investigando si la banda ha perpetrado algún robo en la Costa del Sol, asentamiento de otros delincuentes internacionales. Por ahora, se ha descartado que el grupo esté relacionado con el asalto al viceconsulado de Italia en Málaga, donde tres individuos se apoderaron el pasado día 3 de decenas de pasaportes listos para ser entregados a sus titulares.
Lavazza, Pontolillo, Barcia y Rodríguez rehuían actuar en grandes capitales. Sentían atracción por los bancos que tienen cajas de alquiler para particulares al comprobar que son fáciles de reventar con una palanqueta.
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