Calatrava defiende sus ideas frente a la ingeniería establecida

El arquitecto e ingeniero valenciano Santiago Calatrava, de 45 años, intervino anoche, en la Residencia de Estudiantes de Madrid, en el ciclo Las dos culturas, sobre las relaciones entre la ciencia y la sociedad. En su intervención explicó sus proyectos más conocidos, como los puentes, y su "investigación privada y paciente" de estudio a través de la escultura y la plástica. "Son soluciones e innovaciones poco convencionales que la ingeniería establecida es reticente a permitir". En el mismo lugar donde expusieron sus ideas arquitectos como Le Corbusier y Gropius, Calatrava adelantó algunas teorías para explicar las imágenes de sus obras y proyectos, desde la mecánica cuántica de Planck a la teoría de la relatividad de Einstein, con la intención de resaltar el sentido del movimiento y la fuerza.

A través de diapositivas explicó su arquitectura desde las formas escultóricas, en especial las cúbicas ligadas al equilibrio con cables o la cabeza sujeta al tronco. De los estudios de torsos, que funcionan como la columna vertebral, o las variaciones helicoidales alrededor de un eje vertical, Calatrava pasa a las imágenes reales, donde aplica estas investigaciones, como la torre de los Juegos Olímpicos de Barcelona o el puente del Alamillo en Sevilla.

Formas circulares

Otras aportaciones son los estudios sobre formas circulares, entre objeto y escultura, que después se aprecian en los puentes con arco central o arco inclinado, sin perder de vista la funcionalidad, "que es lo que da bondad y calidad a la obra" ya que, para Calatrava, "los puentes son sitios de paso". En otros ejemplos destaca el valor escultórico de los puentes en su entorno urbano, como los realizados en Valencia y Barcelona. En una charla informal previa a la conferencia, Calatrava comentó que ya se había repuesto "físicamente" del proyecto del Reichstag, en Berlín, que realiza el británico Norman Foster tras una amplia polémica sobre la autoría de la cúpula. También preguntó sobre el concurso de ideas para la ampliación de El Prado e indicó su decepción por declararse desierto. Los cambios introducidos por el Gobierno valenciano en su Ciudad de la Ciencia para Valencia le impidieron concentrarse en su propuesta para el museo y no llegó a presentarse. La Ciudad de la Ciencia quedará recortada en su torre-símbolo y añadirá la construcción de un centro de las artes con una sala para ópera. Calatrava ha unido a sus proyectos actuales -como la nueva terminal de pasajeros del aeropuerto de Sondica, en Bilbao; la Estación de Oriente en Lisboa para la Expo 98; la biblioteca de la Facultad de Derecho de Zúrich, o dos museos de arte moderno en Estados Unidos- el concurso de la estación de alta velocidad de Lieja, que ha ganado en la final frente al italiano Aldo Rossi y el británico Nicholas Grimshaw, autor de la terminal de alta velocidad Waterloo de Londres.