Un primer "aviso" en los papeles de Santi Potros y otro por carta hace dos años
La familia Delclaux, con sólidas raíces en el mundo empresarial y financiero vasco, había recibido dos "avisos" de ETA, según señalaron anoche fuentes policiales.Bajo el nombre de Dulcroux, que la policía atribuye a una transcripción errónea, el apellido aparecía en los documentos incautados en septiembre de 1987 a Santiago Arróspide Sarasola, Santi Potros, tras su detención en Anglet (País Vasco francés). Dulcroux figuraba en una lista de posibles víctimas de extorsión.
Álvaro Delclaux, padre de cinco hijos -uno de ellos el desaparecido Cosme- recibió hace dos años un carta de la organización terrorista en la que se le exigía el llamado impuesto revolucionario. Fuentes policiales señalaron anoche que la familia no aceptó someterse al chantaje, por lo que ETA podría haber optado por el secuestro para intentar conseguir un importante rescate.
Fuentes del Gobierno vasco aseguraron anoche que no es cierto que el nombre de Cosme Delclaux figurara entre los documentos intervenidos a Santi Potros, si bien no desmintieron que en los mismos apareciera la referencia a Dulcroux ni que la familia del ahora desaparecido se hubiera negado a pagar el chantaje a ETA.
De otro lado, el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, y el consejero de Interior del Gobierno vasco, Juan María Atutxa, se pusieron anoche en contacto telefónico con familiares de Cosme Delclaux y les comunicaron cuáles eran las iniciativas policiales que se habían puesto en marcha para averiguar lo ocurrido. Desde el departamento vasco de Interior, se insistía de madrugada en que aún era pronto para asegurar que se trataba de un secuestro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.