Fomento permitirá a Argentaria, La Caixa y BBV entrar en el capital de Retevision

Las entidades financieras que integran el núcleo estable de accionistas de Telefónica (Argentaria, BBV y La Caixa) podrán entrar en el capital de su competidora Retevisión S A, la empresa que se constituirá en el segundo operador global de telecomunicaciones en España. El borrador con las bases del concurso para la privatización del 80% de Retevisión no establece límites a la participación de los accionistas de Telefónica en el capital del segundo operador, aunque fija restricciones sobre su papel en la gestión de la nueva compañía telefónica que no podrán simultanear.

Según el borrador con las bases del concurso que aprobará esta semana el Consejo de Retevisión, en la gestión del segundo operador no podrán participar aquellas compañías financieras, industriales o de servicios que "tengan una presencia activa en otros órganos de la competencia". Es decir, que los miembros del núcleo duro de Telefónica tendrían que dejar el Consejo de Administración de Telefónica si persiguen llegar a tener un papel relevante en la gestión del segundo operador. De esa forma, se pretende garantizar la independencia entre los dos primeros operadores de telefonía básica que actuarán en competencia en el mercado español: Telefónica y la nueva Retevisión, que empezará a prestar servicio antes del verano de 1997. Fomento evita así, además, que alguno de los grupos que están barajando su participación en el proceso para la privatización de Retevisión impugne el concurso , cuando éste se convoque en el mes de diciembre.

Uno de esos grupos es el BBV, que había reaccionado ya en contra de unas manifestaciones del ministro de Fomento, Rafael Arias Salgado, sobre la posibilidad de que se impidiera a los accionistas de Telefónica participar en el proceso de creación del segundo operador. En cualquier caso, el banco vasco aún no se ha manifestado sobre si participará o no en la privatización de Retevisión, y si lo hará directamente o a través de alguna de sus participadas.

Fomento tiene bastante perfilado el calendario que seguirá la formación del segundo operador e incluso ha empezado a mediar en las negociaciones que mantienen Retevisión y Telefónica para establecer el marco de tarifas de interconexión, un asunto prioritario para el segundo operador puesto que, al menos en una primera fase, el 50% de sus gastos irán a parar a Telefónica, hoy por hoy, la empresa a la que están conectados todos los teléfonos.

Una vez que el consejo de Retevisión apruebe las bases del concurso, lo remitirá al Consejo de Estado para que éste determine si existen contradicciones con el decreto ley sobre la liberalización de las telecomunicaciones aprobado el pasado 7 de junio. Posteriormente pasará a Consejo de Ministros para su aprobación.

El consejo de administración de Retevisión prevé también aprobar esta semana la valoración del ente que han hecho la auditora Arthur Andersen y la consultora American Appraisal. Terminado ese proceso, el Consejo de Ministros podrá aprobar, en dos o tres semanas, la constitución de Retevisión Sociedad Anónima, a la que se traspasan todos los activos del ente público, incluida la licencia para prestar servicios de telecomunicaciones. El ente público se reserva la prestación de servicios de difusión de señales de televisión.

Retevisión, que cuenta con unas 1.800 instalaciones repartidas por toda España, factura por encima de los 38.000 millones de pesetas, de los que aproximadamente un 10% se generan con la actividad de alquiler de circuitos, la infraestructura básica con la que el nuevo segundo operador podrá contar para empezar a comercializar sus servicios de telefonía a particulares y empresas. El segundo operador tendrá además actividades en la televisión digital, la transmisión de datos y la telefonía móvil.

En ese sentido, también será importante la decisión final que adopte Retevisión sobre la opción de compra del 3% de Airtel, el operador de telefonía móvil GSM del que son accionistas principales el Banco Central Hispano (BCH), el Santander y Endesa. Los tres en grupo han expresado abiertamente su deseo de participar en el segundo operador global.

Todo indica que Airtel y Retevisión alcanzarán esta semana un acuerdo para que el ente pueda prorrogar su opción de compra más allá de la fecha inicialmente prevista para su vencimiento, en diciembre, y que así este asunto no entorpezca el concurso o pueda llevar a pensar que se favorecen los intereses de los accionistas de Airtel en algún momento.