Asesinado el alcalde de Argel en una emboscada callejera de los integristas islámicos

El alcalde de Argel murió ayer, asesinado por la guerrilla integrista, que le había tendido una emboscada en el centro de la capital. En el atentado murieron otras 13 personas, entre ellas una mujer y algunos miembros del comando islamista. Esta acción constituye una de las acciones guerrilleras más espectaculares de los últimos años, similar a la acaecida en febrero de 1993, cuando los islamistas hicieron estallar, también en pleno centro de la capital argelina, un coche bomba al paso del vehículo del general Jaled Nezar, en aquella época ministro de Defensa.

El asesinato del alcalde de Argel, Alí Bucetta, se produjo a primera hora de la mañana, cuando se dirigía en su automóvil a la sede del Ayuntamiento. El vehículo oficial circulaba a aquella hora por el centro de la ciudad, por las calles del barrio de Telemly, muy cerca de la sede del jefe del Gobierno, del Ministerio de Defensa y del hotel Aurassi, cuando fue atacado por un comando integrista, que disparó fuego graneado contra el vehículo.Las fuerzas policiales que escoltaban el coche del alcalde trataron de responder al ataque y de dar caza a los militantes islamistas, a quienes persiguieron por algunas de las calles. Los integristas acabaron refugiándose en el interior de un chalé, que fue sometido durante varias horas a un estrecho asedio. Fuerzas del Ejército prestaron apoyo a la policía y llegaron a emplazar una ametralladora frente a la vivienda.A media tarde cuando acabó el asedio, las fuerzas de seguridad y los servicios de asistencia civil procedieron a curar a los heridos y a retirar los muertos. Entre los cadáveres se encontraba el cuerpo del alcalde, Alí Bucetta. Su muerte sería confirmada horas más tarde por la agencia estatal de prensa APS, que no facilitaría ningún dato más referido a las circunstancias de su muerte.La primera versión oficiosa indicó que el alcalde había muerto como consecuencia de una bala perdida que le habría alcanzado mientras se encontraba asomado al balcón de su casa. Esta versión, que fue recibida con escepticismo e incredulidad, se vio horas más tarde desplazada por la nueva versión de los hechos, más creíble, que se refería a la emboscada.Alí Bucetta había sido nombrado alcalde de Argel por el jefe del Gobierno al quedar vacante el Ayuntamiento en 1991, tras haber sido destituido el anterior alcalde, Kamel Guemazi un dirigente del Frente Islámico de Salvación, que por aquella época fue internado en un campo de concentración del Sáhara. La revocación del alcalde islamista de Argel no fue un hecho aislado; decisiones similares se adoptaron en más de 500 Ayuntamientos regidos por islamistas de toda Argelia, lo que provocó la cólera de los integristas, que no han dejado de atentar contra los alcaldes.El asesinato de Bucetta coincide con la visita a Argelia del secretario de Estado español, Fernando Villalonga, quien presidió ayer una reunión de la Comisión Mixta Argelo-Española.