Aznar cree que el ideal de construcción europea recobra vigor en España

El presidente del Gobierno, José María Aznar, dijo ayer que el ideal de Europa vuelve a renacer con fuerza en España, tras algunos años de decaimiento y que nuestro país será un "socio serio y activo" en la construcción europea. Aznar, que reiteró la voluntad del Gobierno que preside para colocar a España en las posiciones de cabeza en la carrera hacia la unión económica y monetaria, presentó ayer una conferencia del primer ministro belga, Jean Luc Dehaene, en la Fundación Carlos de Amberes.El primer ministro de Bélgica abordó en su conferencia los tres desafíos con que se enfrenta la idea de Europa en este final de siglo: la Conferencia Intergubernamental, que corregirá las disfunciones del tratado de Maastricht; la unión económica y monetaria, como elemento clave de integración; y la ampliación de la Unión, que calificó de "irreversible".

Europeísta convencido, el dirigente demócrata-cristiano, de 56 años, abogó ayer por un "acercamiento dinámico" a la Europa del siglo XXI, como llave del motor que engrane las, diferentes velocidades con que los Estados se incorporarán a la Unión Europea. En su opinión, la integración diferenciada se manifestará a causa de la ampliación, que hará que la Unión Europea sea más diversa y menos homogénea.

El primer ministro belga viajó expresamente a Madrid para pronunciar la VII Lección Conmemorativa Carlos de Amberes, organizada por la Real Fundación de San Andrés de los Flamencos, cuyo propósito es estrechar los lazos entre España, Bélgica, Luxemburgo y Holanda. Miguel Angel Aguilar, presidente de la comisión ejecutiva de la fundación, presentó el acto, al que asistieron destacadas personalidades de la vida política y social española.

Obligación moral

Dehaene señaló en su conferencia que las tareas de ampliación de la Unión Europea responden no sólo a una obligación moral, sino a una necesidad política. Ello obligará a adaptar las instituciones para albergar "quizás algún día a 27 o 30 miembros".Sobre la unión económica y monetaria, el mandatario belga se felicitó por "el elevado nivel de credibilidad" alcanzado por la meneda única, lo que parecía "un sueño utópico tras las tempestades monetarias de 1992 y 1993".

En su opinión, la moneda única protegerá la economía europea contra la inestabilidad financiera, vigorizará el mercado interior y constituirá el motor de la integración. Con el euro, "Europa será mucho más fuerte respecto a Estados Unidos para llevar a cabo una política monetaria que sirva a la vez a los intereses de los europeos y a los de la economía mundial", dijo Dehaene.

Tras la conferencia, Dehaene cenó con Aznar en el palacio de la Moncloa antes de regresar a Bruselas.