Buda y 'Pulp Fiction'
Robert F.Thurman es un hombre singular. Incluso habla bien de Pulp fiction, que, por cierto, protagonizaba su hija, Uma Thurman. "La violencia de Tarantíno no es real, es una broma. Hay una gran diferencia entre sus películas y aquellas en las que sí se rinde culto a la violencia", señaló. Jovial, e, apasionado por el budismo casi hasta la vehemencia, Robert F. Thurman subraya que detesta la violencia de que hace gala el cine contemporáneo. Pero salva a Tarantino y también, al menos en parte, a Oliver Stone, cineasta al que Thurman conoce y que, afirma, es buen amigo de los tibetanos. "Creo que una película como Platoon es un buen revulsivo contra la violencia", dice, "pero no me siento muy capaz de enjuiciar positivamente Asesinos natos; el propio Oliver Stone está muy preocupado con esa película". Thurman señala que su hija Uma -"budista en un sentido amplio, como yo", dice- detesta igualmente las películas violentas pero hace la misma salvedad con el cine de Tarantino.
Richard Gere es, sin duda, exceptuando al Dalai Lama, el personaje mas conocido vinculado a la Casa del Tíbet. Uma colabora con ellos en la defensa de la cultura del país y figura en la lista de agradecimientos de la exposición El arte sagrado del Tíbet.
Thurman salta cuando se le pregunta si no es paradójico que el mundo rutilante de Nueva York y Hollywood se apasione con la cultura y la causa de un país desértico y pobre como el Tíbet. "Ah, no, el Tíbet no es desértico ni pobre. Eso son ideas negativas propagadas en gran parte por los chinos [que gobiernan el país, del que el Dalai Lama se exilió en 1959]. La gente es pobre en Harlem, pero no en el Tíbet".
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