Rato presenta hoy los presupuestos en medio de protestas de los funcionarios

El vicepresidente y ministro de Economía, Rodrigo Rato, llegará hoy al Parlamento cargado con los gruesos volúmenes de los Presupuestos Generales y rodeado de las voces de protesta de los empleados públicos contra la congelación de sus salarios. Los sindicatos de la administración pública tienen previsto entregar en el Congreso de los Diputados un documento dirigido a todos los grupos parlamentarios en el que manifiestan un rechazo unánime a la decisión del Gobierno.La entrega de ese escrito, prevista para las once de la mañana, se debe producir coincidiendo con el acto de entrega del proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 1997.

Con esa protesta los empleados públicos inician las movilizaciones acordadas por todos los sindicatos de la función pública -CC OO, UGT, CSI-CSIF, USO, CGT, CIG y las organizaciones de policías SUP y UFP-. Posteriormente, a las doce de la mañana, se producirá una concentración de trabajadores ante la sede del Ministerio de Economía, paralela a actos similares que tendrán lugar en toda España ante las Delegaciones del Gobierno y los Gobiernos Civiles.

Reuniones con los partidos

Los sindicatos pretenden también mantener reuniones con los grupos parlamentarios para que éstos presenten enmiendas al proyecto de ley de Presupuestos que corrijan la decisión del Gobierno sobre sus salarios. Los servicios jurídicos de las centrales estudian la presentación de un recurso para que medie en el conflicto el Defensor del Pueblo por el incumplimiento del acuerdo firmado con el anterior Gobierno socialista y con vigencia hasta 1997, donde se recogía un incremento salarial igual a la inflación prevista. Asímismo emprenderán otras iniciativas ante los tribunales y ante la Organización Internacional del Trabajo.Para el 15 de octubre, han convocado manifestaciones en toda España, y posteriormente analizarán el resultado de esas movilizaciones. Si el Gobierno no ha corregido la subida cero, decidirán otras protestas más contundentes, entre ellas huelgas en la función pública.

De esta forma cerrarán una primera fase para sensibilizar a los empleados públicos contra una congelación salarial que ha ido precedida de otras aplicadas por el anterior Gobierno; una contención salarial que en los últimos cinco años -incluido 1997- les ha producido una perdida del poder adquisitivo del 11,2%. El Gobierno justifica esa medida en la necesidad de cumplir los requisitivos de convergencia y en la contención del déficit para que España pueda acceder en una primera fase a la Unión Monetaria. El Ejecutivo evalúa el ahorro en retribuciones de los funcionarios en unos 200.000 millones de pesetas.