La nueva financiación autonómica cuesta 40.000 millones más al año

El Gobierno consiguió pasar ayer uno de sus compromisos más importantes antes de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 1997. El nuevo sistema de financiación autonómica, que regirá en los próximos cinco años, quedó aprobado sin alterar el pacto de legislatura firmado con CIU y con el respaldo unánime de las 10 autonomías gobernadas por los populares. Las tres comunidades regidas por los socialistas votaron en contra. Pero el apoyo de la regiones del PP no va a ser gratis. El Gobierno tuvo que poner encima de la mesa 200.000 millones de pesetas.

Ésa es la cantidad que, según el ministro para las Administraciones Públicas, Maríano Rajoy, tendrá que poner el Estado durante los próximos cinco años para garantizar que ninguna comunidad saldrá perjudicada con el nuevo sistema de financiación autonómica. Con los; 200.000 millones el Gobierno logró el apoyo de algunas comunidades del PP, que, la semana pasada, amagaron con un conato de rebelión contra la propuesta de ceder a las autonomías el 30% del impuesto sobre la renta.La aportación del Gobierno no fue suficiente, sin embargo, para que el plan de financiación saliera con el apoyo unánime de las comunidades afectadas (todas excepto el País Vasco y Navarra). Las tres socialistas -Andalucía, Extremadura y Castilla La Mancha- votaron en contra al término de la reunión que durante cuatro horas celebró ayer el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

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