Los médicos harán pruebas a Yeltsin durante dos días más para operarle

El presidente ruso, Borís Yeltsin, permanecerá internado dos días más en el Hospital Clínico Central de Moscú, donde se le están realizando una serie de exámenes y aplicando el tratamiento necesario para poderle efectuar la operación de corazón programada para fin de mes. Yeltsin fue internado el viernes pasado y en aquella ocasión se dijo que permanecería en el hospital del Kremlin hasta el domingo.La prolongación por dos días de la hospitalización de Yeltsin indica que los médicos han encontrado algo que corregir antes de realizar la operación de bypass en el corazón que le practicará un equipo compuesto por especialistas rusos y extranjeros. Esas posibles complicaciones pueden referirse tanto a problemas coronarios como a otros órganos.

La radio Eco de Moscú difundió ayer que el presidente ruso ha perdido el apetito y el sueño ante la proximidad de la operación. "La perspectiva de una operación grave ha afectado de forma muy negativa a su sistema nervioso", añadió la emisora.

Yeltsin seguramente será dado de alta junto con su esposa Naína, que el pasado 24 de agosto se operó en el Hospital Clínico Central de Moscú de un riñón. El presidente piensa reanudar después sus interrumpida s vacaciones en la residencia Rus, en la localidad de Zavídovo, a 95 kilómetros al noroeste de Moscú.

A pesar de la próxima operación, Yeltsin se ha negado por el momento a traspasar la jefatura del Estado al primer ministro, Víktor Chernomirdin, limitándose a cederle el control de los llamados ministerios de fuerza (Defensa, Interior, Seguridad, Espionaje, Guardafronteras y Situaciones de Emergencia). El presidente tampoco ha entregado el botón nuclear y, por el momento, el Kremlin no ha dicho en manos de quién estará mientras Yeltsin sea operado.

La Constitución rusa

Según la Constitución rusa, durante la ausencia prolongada o enfermedad del presidente el primer ministro asume la jefatura del Estado, y, por tanto, lo lógico sería que el maletín nuclear pasara a manos de Chernomirdin al menos durante las horas que dure la intervención.Tanto Alexandr Lébed, su aliado y secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, como la oposición de izquierda, liderada por el Partido Comunista, están presionando a Yeltsin para que transfiera oficialmente los poderes a Chernomirdin durante la intervención y el posoperatorio.

Lébed, mientras tanto, debe viajar hoy nuevamente a Chechenia para resolver los últimos problemas surgidos con la retira da de las tropas rusas. Lébed se entrevistará en Grozni con el comandante de las fuerzas federa les emplazadas en Chechenia, Viacheslav Tijomírov, quien la semana pasada anunció la sus pensión de la retirada de los soldados del Kremlin hasta que no se resuelva el problema de la liberación de los prisioneros.