_
_
_
_
_
OFENSIVA TERRORISTA

ETA asesina a tiros a un industrial de Guipúzcoa que había pagado el 'impuesto revolucionario'

ETA acribilló ayer a balazos en Ordizia (Guipúzcoa) al empresario Isidro Usabiaga Esnaola, que en agosto de 1993 fue filmado por la Ertzaintza cuando se sometía al chantaje económico de la organización terrorista. Según la Consejería de Interior, Usabiaga, de 52 años, padre de tres hijos, no colaboró con la policía autónoma en la desarticulación de la red de extorsión de ETA practicada en aquellas fechas. Interior sostiene que el empresario entregó al menos 10 millones a los terroristas e insertó publicidad en el diario Egin, lo que a su juicio es una forma encubierta de pagar el impuesto revolucionario.

Más información
Respuesta de los empresarios: "No nos vais a matar a todos"
Un vídeo policial de Usabiaga ayudó a desarticular una red de chantaje
Diálogo con el extorsionador

Igual que hace 10 años con el asesinato de la ex dirigente de ETA María Dolores González Catarain, Yoyes, los terroristas irrumpieron ayer en Ordizia para teñir de sangre la fiesta de la localidad y cumplir con su ritual de muerte. Era noche de disfraces y algunos vecinos que se retiraban a sus casas creyeron que el bulto abandonado en la acera de la calle de Filipeneta, al pie del callejón que conduce a la casa de los Usabiaga, era un monigote más de los utilizados en la fiesta.Isidro Usabiaga, el hombre más emprendedor de una familia de siete hermanos con negocios en la construcción, las inmobiliarias y los seguros, acababa de despedirse de sus amigos en el bar Olano, sobre las 4.30 de la mañana, después de haber cenado en su sociedad gastronómica. A escasos 50 metros de su casa, los asesinos le salieron al paso y le descerrajaron cinco tiros a quemarropa (uno en la cabeza, tres en el tórax y otro en un muslo). No murió en el acto.

Empapado en sangre

A las 4.55 horas de la madrugada, un vecino encontró a Usabiaga empapado en sangre, pero todavía con vida. Los intentos de reanimarle por parte del personal de la Cruz Roja resultaron infructuosos. El herido falleció mientras era trasladado al ambulatorio de Ordizia. En el lugar de los hechos se hallaron cinco casquillos del calibre 9 milímetros parabellum, de la marca SF, munición habitual de ETA.

Pocos minutos más tarde, varios individuos apedrearon las oficinas de seguros que dirige la cuñada de la víctima en la misma localidad. "No consideramos casualidad que mientras este hombre yacía en el suelo otros intereses de la familia fueran atacados por enésima vez, y además se hacían explotar petardos no se sabe con qué macabro sentido", se señala en la moción aprobada ayer por el pleno municipal.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

No hay ningún testigo del atentado, perpetrado a poco más de 10 metros del gaztetxe (local juvenil, en muchos casos controlados por simpatizantes de HB) en el que a mediodía de ayer seguía el jolgorio y la música. Mientras, dos centenares de vecinos se dirigían espontáneamente al lugar del crimen en un gesto de duelo silencioso.

La policía sospecha que ETA intentó matar a Usabiaga el pasado domingo. Dos personas robaron ese día un coche a punta de pistola en Ordizia y obligaron a sus ocupantes a dirigirse a la zona conocida como Los chalés, donde vivía el empresario. Pero los terroristas no pudieron consumar su intento y abandonaron el coche en una calle del pueblo.

La noticia cubrió al pueblo de Ordizia con un manto de pesadumbre. Muchos de los habitantes de esta población del Goiherri han sentido esta muerte como un desgarro personal. Las fiestas patronales fueron suspendidas inmediatamente por decisión del alcalde, el peneuvista Juan Vicente Erauskin.

A mediodía, con las calles vacías, bajo una lluvia persistente, más de un centenar de personas con rostros pesarosos e indignados se congregó en el Ayuntamiento para asistir al pleno extraordinario. Dos concejales de HB -el tercero, Josu Aierbe está actualmente encarcelado- acudieron al Ayuntamiento escoltados por militantes de HB que portaban pegatinas con el lema Euskal Herria Askatu (País Vasco libre). Los otros 10 concejales aprobaron la moción de condena, en la que se afirma que el atentado es el resultado de una campaña de acoso contra un hombre que lo único que ha hecho ha sido trabajar por Ordizia.

"Queremos gritar a los cuatro vientos que este asesinato va contra Ordizia, queremos gritar bien alto a ETA y a HB que estamos con Isidro y con lo que él representa, un hombre emprendedor, pleno de ilusión por hacer muchas cosas por su pueblo y por sus vecinos", reza la moción.

HB rechaza la moción

Los concejales de HB rechazaron la moción apelando a la pretendida "guerra entre el pueblo vasco y el Estado español", pero sus palabras sonaron vacías en un escenario cargado de emoción, con los sentimientos en carne viva.

Cuando el alcalde leyó el último párrafo de la moción aprobada por el PP, IU, PSE-PSOE, Eusko Alkartasuna y PNV,-"con el asesinato de Isidro habéis arrancado un pedazo de corazón de Ordizia", dice- la emoción terminó por aflorar en los rostros llorosos de muchos de los asistentes. El Ayuntamiento pidió a los vecinos que coloquen sábanas con crespones negros en sus casas y se sumen hoy a la manifestación convocada por Gesto por la Paz.

En lo que va de año, ETA ha asesinado a cinco personas, con lo que se elevan a 750 las víctimas mortales de la organización terrorista desde que el 7 de junio de 1968 perpetró su primer atentado. 514 asesinatos se produjeron en Euskadi.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_