Dos vigilantes, despedidos por sustraer 40 libros del Ministerio de Cultura
Dos vigilantes de la empresa de seguridad que custodia la sede de la Subdirección General del Libro y Lectura han sido apartados de sus puestos por, presuntamente, robar una colección infantil de libros -formada por 40 volúmenes- y varios vídeos. Todos los títulos sustraídos -salvo tres, y en general de escaso valor- fueron recuperados días después de desaparecer, según indicó ayer Pilar Barrero, responsable de este departamento, que depende del Ministerio de Cultura. Entre los títulos sustraídos y luego parcialmente recuperados, figuran obras de Manuel Machado, Camilo José Cela y Cervantes, entre otros.Ambos guardias estaban de servicio en el centro el fin de semana en que desaparecieron. "No sé si han sido despedidos; lo cierto es que ya no trabajan aquí, pues es una contrata", afirmó Barrero. Una cámara de vídeo grabó a un vigilante que salía del centro hacia el garaje, con libros semiocultos bajo el brazo, y regresaba luego sin ellos. Salió varias veces. Fernando Rodríguez, director general del Libro, matizó ayer que la sustracción se produjo antes de acceder él al cargo, a finales de abril. No obstante, subrayó que ya "ha tomado medidas" para que nunca más se repitan hechos de este tenor.
Los vigilantes niegan ser los autores del robo, a pesar de que uno de ellos, al ser informado de la desaparición de los volúmenes y de la existencia del vídeo, admitió su participación, e implicó a otro compañero. Además, se comprometió a devolverlos. Como así ocurrió, pero a través de terceras personas. Los guardias aseguran ahora que ellos no robaron nada, y que se trata de una argucia empresarial para justificar sus despidos.