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El Ejército de Sri Lanka y los tamiles libran su más dura batalla en 13 años

Los más duros combates en 13 años entre los Tigres de Liberación de la Tierra Tamil (LTTE) y el Ejército de Sri Lanka se recrudecieron ayer al enviar el Gobierno un nuevo contingente de tropas para tratar de recuperar la base de Mullaitivu, en poder de los rebeldes desde el sábado pasado. Según el Ministerio de Defensa, se ha logrado establecer al sur de la base una cabeza de playa para. el desembarco de las tropas, pero la dureza de los ataques de los tigres impide el acceso al estratégico campamento militar.

Al parecer, los más de 1.200 soldados de Mullaitivu están todos muertos. Así lo propaga desde el domingo La Voz Tamil, la emisora rebelde. También el puñado de soldados que logró escaparse saltando por los árboles a través de la jungla asegura que "la base fue totalmente destruida" por los LTTE."Nunca he visto un ataque semejante. Fue horrible. Luchamos como pudimos, pero los rebeldes dispararon sus morteros sin descanso contra nosotros", señala W. G. Damnike, un soldado de 19 años que se: recupera en un hospital de Colombo. Otro de los pocos que lograron huir indicó que vio desde los árboles cómo los rebeldes llenaban sus camiones con las armas y las municiones de la base.

La Voz Tamil indicó que el ataque contra Mullaitivu, iniciado el pasado día 18, tenía como fin conmemorar el 13º aniversario de la "guerra de liberación" tamil, que se cumplió ayer. El 23 de julio de 1983 aparecieron muertos y mutilados 13 soldados de la etnia mayoritaria cingalesa, lo que provocó unos disturbios generalizados en toda la isla contra la minoría tamil y el inicio de una guerra que se ha cobrado cerca de 60.000 vidas.

El Gobierno reconoció que éste ha sido el ataque más sangriento de la guerrilla en estos 13 años de lucha, y ha puesto en estado de máxima alerta todas sus tropas ante la posibilidad de nuevos ataques en cualquier otro punto del país.

Para la guerrilla, el ataque contra Mullaitivu es, sin duda, la esperada venganza contra la ofensiva militar que les echó de la península de Jaffna, en cuya ciudad tenían establecido su cuartel general hasta que en abril pasado cayo en manos gubernamentales.

Un portavoz militar indicó que la aviación ha destruido el centenar de botes utilizados por la guerrilla para aproximarse por mar a Mullaitivu. La base, situada en una zona de jungla, es de difícil acceso por tierra. Los rebeldes, escondidos en el espeso follaje, atacan a las columnas que intentan aproximarse.

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