Croacia y el Tribunal de La Haya

En el contexto de la noticia de agencias publicada en EL PAÍS del 11 de julio sobre la entrega a las autoridades del Tribunal de La Haya, por parte de las autoridades croatas, de Zlatko Aleksovski, el bosniocroata acusado de crímenes de guerra, también se llega a alegar que Croacia, sin embargo, sigue protegiendo a Dario Kordic, inculpado de la ejecución de civiles musulmanes. Y para apoyar esta afirmación se explica que "Kordic vive sin ser molestado en la capital croata".Esta información sigue a otra sobre la disposición del tribunal a declarar prófugos internacionales a Karadzic y Mladic. Siendo bien conocido el rechazo total de los serbios a cooperar con el tribunal, el montaje de noticias sugiere -una vez más- a los lectores de EL PAÍS que "todos estos balcánicos son iguales".

Era precisamente esa noción y política de equidistancia que regía la gestión internacional de la crisis ex yugoslava hasta los acuerdos de Dayton lo que generaba la putrefacción de todos los intentos del mantenimiento de "la paz". Para evitar que una vez más se generen en la opinión pública y política los sentimientos del estancamiento y desesperación ante las perspectivas de paz, es preciso aclarar la posición de mi Gobierno respecto al Tribunal Internacional de La Haya.

Croacia ha sido uno de los países iniciadores del Tribunal Internacional de Crímenes de Guerra en la Antigua Yugoslavia. Es el primero y hasta ahora el único país de la zona cuyo Parlamento ha adoptado la Ley Constitucional sobre la Cooperación con el Tribunal de La Haya, que permite extraditar legalmente a los acusados, sean ciudadanos croatas o personas inculpadas que se encuentren en nuestro territorio. Mucho antes de que fuese aprobada dicha ley, Croacia había ayudado a la fiscalía del tribunal a establecer su oficina de investigación en Zagreb. A través de la mediación de las autoridades croatas se ha presentado voluntariamente ante el tribunal el general Tihomir Blaskic, sobre el cual pesa la misma acusación que sobre Kordic.

Dario Kordic, simplemente, no vive en la capital y tampoco en cualquier otro lugar de Croacia, sino en el territorio de la Federación de Bosnia-Herzegovina. Por tanto, son las autoridades federales (sean croatas o bosnias) las responsables de su detención y entrega al Tribunal de La Haya. Sin embargo, y como declaró públicamente el ministro de Exteriores de Croacia, Mate Granic, Kordic o cualquier otra persona que sea acusada de crímenes de guerra por el tribunal internacional y que se encuentre en el territorio de Croacia será inmediatamente detenida y entregada al Tribunal de La Haya sin demora. Éste fue el caso del inculpado Aleksovski: una vez descubierta su presencia en el territorio de Croacia, en Split, fue detenido y entregado al tribunal sin demora.-

. Embajador de Croacia.