Los científicos invalidan los estudios que utilizó Bruselas para levantar el embargo a Ias gelatinas de vacuno británico

El subgrupo del Comité Científico Veterinario formado para controlar la encefalopatía espongiforme bovina (ESB) ha considerado no válidos los estudios en que se basó la Comisión Europea para decidir el levantamiento del embargo que pesaba sobre las gelatinas elaboradas con materia prima procedente de ganado vacuno del Reino Unido. Hasta ahora, las recomendaciones realizadas por un subgrupo especializado siempre han sido adoptadas por el Comité Científico Veterinario.El dictamen fue comunicado a la Comisión Europea el pasado 26 de junio, pero hasta la fecha Bruselas no lo había hecho público. Los científicos consideran que, a la luz de nuevos datos aportados el 14 de junio por el Instituto de Investigación Inveresk sobre el proceso de manipulación de las gelatinas, deben ser ignorados los datos en que, se basó el Comité Científico Veterinario para valorar si el elemento causante de la ESB (la enfermedad de las vacas locas) desaparece al ser sometida la gelatina a determinados tratamientos.

A juicio de estos científicos, todavía no hay datos suficientes para asegurar el grado de inactivación del agente de la encefalopatía espongiforme bovina, por lo que todos los estudios deben iniciarse de nuevo. El subgrupo recomienda al Comité Científico Veterinario que haga una nueva evaluación de los riesgos de la gelatina "a la luz de los nuevos datos".

El dictamen de este grupo de científicos supone un duro golpe para las tesis del comisario de Agricultura, Franz Fischler, ardiente defensor de la suavización del embargo impuesto por la Comisión Europea al vacuno británico y sus derivados. También confirma que Bruselas se acogió a los datos más optimistas de los numerosos informes científicos que barajó, ignorando aquellos consejos que eran contrarios a la relajación del embargo contra Londres.

La Comisión Europea tendrá ocasión de dar explicaciones al Parlamento Europeo, cuyo pleno celebrará hoy un debate sobre el tratamiento que Bruselas ha otorgado a la crisis de las vacas locas.