El déficit del Estado cae el 22,2% hasta mayo y se sitúa en el 1,5% sobre el PIB

El déficit de caja no financiero del Estado se ha reducido el 22,2% en los cinco primeros, meses del año, fundamentalmente como consecuencia de una mayor contención de los gastos y un incremento de los ingresos muy favorecido por las privatizaciones. En relación al producto interior bruto (PIB), el déficit es del 1,5%, frente al 2% del mismo periodo del año anterior. La evolución del presupuesto fue explicada ayer por el secretario de Estado de Presupuesto y Gasto Público, José Folgado, en su primera comparecencia ante el Congreso. El pago de intereses por deuda aumenta el 26,5%.

Según se puso ayer de manifiesto, a 31 de mayo el déficit de caja no financiero del Estado (no se incluyen las comunidades autónomas, ayuntamientos y Seguridad Social, que completarían el déficit público) se situó en 1.1985,5 billones, lo que supone un 22,2% menos que en igual periodo del año anterior. Esta mejora se produce tras un aumento de los ingresos del 12% frente a un incremento de los gastos de sólo el 4,9%. En relación al PIB el déficit ha disminuido en lo que va de año el 0,5%, situándose en el 1,5% (el objetivo es conseguir un 3,5% este año). La mejora en el déficit se produce pese a los datos de mayo, mes en el que el desequilibrio aumentó un 3% con respecto al año anterior, pero por motivos coyunturales, ya que en mayo de 1995 se contabilizó la privatización parcial de Repsol. Hasta mayo los ingresos que más han crecido porcentualmente (25,1%) son los no impositivos, especialmente por el incremento registrado en los beneficios ingresados en una cuenta del Banco de España, que han pasado de 70.400 millones en mayo de 1995 a 226.300 millones este año. Las privatizaciones y esos mayores beneficios ingresados en el Banco de España provocan que los ingresos patrimoniales hayan crecido un 46,1 % hasta totalizar 450.800 millones.

Los ingresos por impuestos directos han crecido un 10,5%, con lo que se ajustan a los previsto, mientras los indirectos suben el 9,9%, por debajo de los esperado. La recaudación por IRPF se incrementa en un 9%, mientras os ingresos obtenidos por el Impuesto de Sociedades sube un 29,3% por las retenciones de capital mobiliario y el pago a cuenta de Patrimonio por la privatización de un tramo de Argentaria. La recaudación por este impuesto hasta mayo, sin embargo, es poco significativa porque aún quedan por efectuar la mayor parte de las liquidaciones anuales de 1995.

En cuanto a impuestos indirectos, por IVA aumentan los ingresos un 12,7% y por impuestos especiales, un 5,8%. La atenuación del consumo privado es la principal causa de que la evolución vaya por debajo de lo esperado.

Por lo que se refiere a los pagos, destaca el incremento del 26,5% de los gastos financieros atribuible, según el Ministerio de Economía a los vencimientos de los mismos, de modo que si se atiende sólo a las obligaciones reconocidas el aumento sería del 8,2%. El peso del pago de intereses por la deuda es tal -1,3 billones hasta mayo- que si se resta del déficit de caja a finales de mayo se produce un superávit primario (mayores ingresos que pagos) por valor de 308.000 millones de pesetas, lo que no ocurría desde 1989.

Las transferencias corrientes absorben más de la mitad de los pagos no financieros y, entre ellas, destacan 1,4 billones transferidos a la Seguridad Social, lo que supone un incremento del 15,6%, destinados en su mayor parte a financiar al Insalud, que se lleva 1,1 billones. Los fondos transferidos al Inem se reducen, por el contrario, un 60%.

Las necesidades de financiación, a finales de mayo ascendían a 1.019,6 billones, lo que supone un incremento del 32,7%. El aumento se debe a la no utilización en lo que va de ejercicio de los fondos depositados en la cuenta del Banco de España.