La competencia de Telefónica

Los largos años de monopolio de Telefónica en el servicio básico de voz tocan a su fin. El ministro de Fomento, Rafael Arias Salgado, anunció el pasado martes que Retevisión, el ente público que sirve las señales de televisión a las cadenas públicas y privadas, podrá operar en telefonía básica desde enero de 1997. Previamente Retevisión creará una empresa privada en la que el Estado se reservará en torno a un 20%, más o menos lo que tiene actualmente en Telefónica.Ésta es una de las primeras consecuencias que se desprenden del real decreto de liberalización de las telecomunicaciones que fue publicado en el Boletín Oficial del Estado el pasado 8 de junio y que tiene que ser todavía ratificado por las Cortes en el transcurso de los próximos 30 días.

Con esta medida, España se anticipa incluso al calendario de liberalizaciones -enero de 1998- previsto por la Unión Europea para casi todos los países miembros. No obstante, y según explicaciones del propio ministro de Fomento, "la liberalización se va a hacer de forma acompasada", de tal manera que el Gobierno del PP se propone usar al menos en parte la prórroga que tiene España hasta el 2003.

Duopolio

El Gobierno ha optado, por tanto, en telefonía básica, por el sistema de duopolio, para que compitan dos grupos de operadores españoles que puedan mantener sus respectivas alianzas internacionales. No existe, sin embargo, acuerdo en el sector de las telecomunicaciones a la hora de calificar la forma en la que se pretende acabar con el monopolio, ya que Telefónica sale perjudicada sin obtener compensaciones.Por ejemplo, Retevisión podrá usar a precio de coste desde el primer instante la red básica de Telefónica, mientras que esta empresa no podrá usar su red para transportar señales de televisión. El monopolio del transporte de estas señales quedará en manos de Retevisión hasta 1999.

Previamente, Retevisión creará una empresa privada en la que no podrán participar ninguno de los socios actuales de Telefónica (La Caixa, BBV, Argentaria, entre los considerados como núcleo duro). Es muy previsible, como se ha anunciado repetidamente, que el núcleo duro de Retevisión lo constituyan el Santander, el BCH, las eléctricas y la multinacional Cable & Wireless, a los que podrían unirse el operador de telefonía móvil Airtel y la cadena de televisión Antena 3.

En el mismo paquete de medidas, el Gobierno ha incluido la creación de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones, órgano regulador que, según el ministro de Fomento, va a funcionar con la misma independencia con que actúa el Banco de España o la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Además se reforman algunos aspectos de las leyes de Ordenación de las Telecomunicaciones y del Cable.