Cale y Reixa cierran Poética

Poética, el festival, internacional de poesía organizado por Festimad e impulsado por Ana Curra, concluyó en la madrugada de ayer. La independencia, la ausencia de ortodoxias y la marginalidad en forma de libertad dialéctica se manifestaron en dos veladas marcadas por el éxito tanto de público como de organización. En la segunda y última jornada, celebrada en el colegio mayor san Juan Evangelista, de Madrid, participaron John Cale, Gonzalo, Rojas, Antón Reixa, los Islamic Diggers y Tav Falco.

Cerró la noche John Cale, el mítico músico que fue parte fundamental de la Velvet. Underground. Cambió rotundamente el ámbito poético y, acompañado por un teclado pero abriendo su actuación con el recitado a pelo y en inglés de un par de poemas, Sabotaje y La Antártida empieza aquí, se despidió la última noche de Poética con la desolación de sus narraciones y la amargura de su elocuencia seguidas de un largo aplauso.Uno de los objetivos que parece haber logrado este festival de poesía ha sido sin duda acortar la distancia entre el público y la poesía, ensalzada por las variadas manifestaciones artísticas de los participantes en las dos veladas. En la anterior participaron Giorno, Loriga, Oroza, García Calvo, Panero, Lencero, Zorrilla, Alas y Ferrero.

La segunda sesión comenzó con el poeta chileno Gonzalo Rojas. La vitalidad poética y personal de este autor, que recitó solo ante el micrófono con acento hipnótico, entusiasmó al numeroso público. Entre poema y poema, dio una lección de poesía y de optimismo, hay viejos y viejos", afirmó con una voz oceánica que recordaba a su compatriota Neruda, aderezada con un deje de ironía y de juego: "Yo dije no a la decrepitud y me vuelvo hacia la lozanía y hacia la marginalidad que hace libres".

Combativo

A continuación apareció Antón Reixa, "gallego y artista", con un montaje combativo e hilarante al que acompañó en el ritmo incansable y rapeado de su voz la, proyección de dibujos de Antón Patino y el sonido pregrabado del discurso de "embestidura" de un político que Reixa imaginó "con bigotes". Reixa recitó, reflexionó, ironizó, teorizó sobre haiku japonés y sobre la sensibilidad que trató de inculcarle su jefe de estudios.El cantante de Mississippi Tav Falco, también escritor y autor de bandas sonoras, se acercó, junto a su guitarra, para repasar algunas letras de sus canciones y mostrar un par de cortos escritos y dirigidos por él que animaron, en forma de vídeo, dos temas de su repertorio. El cantante dio vida a sus obsesiones por un pasado más romántico hablando de carreteras, locales, soledad y desamores, desgranando tópicos en una. poesía encontrada con la canción en forma de blues.

Los británicos Islamic Diggers, se acercaron bajo la fascinación de su contacto con Marruecos. La poética del trío se presentó en forma de denuncia; arropados por música pregrabada que fusiona el rai, el dub, el ambient y el hip-hop, lanzaron a voces sus consignas: "Free rent, free food, free sex, free people". Como compañeros de viaje, con los que compartieron escenario, se acercaron Mohamed Hairiry, que habló de su vida en Marruecos y de sus. contactos con Paul Bowles y William Borrowghs, y de un músico de la ciudad de Joujotika que amenizó el anárquico e histriónico performance con sus canciones suries. Todo esto arropado por una película realizada por los Islamic Diggers, Joujouka, con imágenes de escenas de Marruecos.