Garzón ordena dos detenciones tras tomar declaración a Roldán sobre el 'GAL verde'

Luis Roldán consumó ayer la amenaza de "tirar de la manta" que lanzó el año pasado tras ser detenido en Laos. Durante seis horas y media declaró ante el magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón sobre el GAL verde, la presunta implicación de guardias civiles en la guerra sucia contra ETA. Las revelaciones del ex director general de la Guardia Civil, centradas en el asesinato del etarra Ramón Oñaederra, llevaron al juez a dictar dos órdenes de detención, aunque sólo se pudo cumplimentar una. El detenido, en cuya casa fueron incautadas dos cajas de documentos, fue conducido ante Garzón a medianoche. A las 2.30 de la madrugada ingresó en prisión. Roldán, que entró como testigo del caso Oñaederra y salió como imputado, pidió declarar ante los otros jueces que investigan a los GAL: Eduardo Móner y Javier Gómez de Liaño.

Roldán fue interrogado por Garzón sobre actividades presuntamente delictivas cometidas por guardias civiles del cuartel de Intxaurrondo, a cuyo frente estuvo Enrique Rodríguez Galindo, posteriormente ascendido a general. En concreto, Roldán declaró sobre el teniente de la Guardia Civil Pedro Gómez Nieto, imputado en el caso Oñaederra, y el ex sargento Enrique Dorado Villalobos y el ex agente Felipe Bayo, principales sospechosos del asesinato de José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala. Fuentes jurídicas aseguran que también fue interrogado sobre el general Galindo.Al filo de la medianoche, la policía judicial condujo al juzgado de Garzón al detenido, cuya identidad no fue facilitada. Llegó en un vehículo, tumbado en el suelo, para evitar ser fotografiado o reconocido. Fuentes jurídicas consideran probable que se produzcan nuevas detenciones.

En la sesión de la mañana, sorprendentemente, cuando Garzón le estaba tomando declaración en relación con el asesinato de Oñaederra, Roldán intentó hablar sobre José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala, ante lo que el juez le interrumpió para decirle que ese sumario se tramitaba en otro juzgado.

Inmediatamente, Roldán pidió declarar en el caso Lasa-Zabala. Sus abogados se personaron en el Juzgado de Guardia de la Audiencia Nacional y solicitaron que Roldán comparezca en este sumario. El escrito de comparecencia. fue remitido al instructor del caso, Javier Gómez de Liaño. Por su parte, Garzón envió un oficio a Gómez de Liaño en el que le comunica la intención de Roldán de aportar nuevos datos en dicho sumario. Previsiblemente, Roldán será citado a declarar por Gómez de Liaño en los próximos días.

El juez, Baltasar Garzón cambió la condición de testigo a imputado a Roldán en el sumario sobre el asesinato Ramón Oñaederra, Kattu, en el bar Caiette de Bayona (Francia) el 19 de diciembre de 1983 y que fue reivindicado por los GAL.

En el caso Oñaederra figuran como imputados el ex jefe de la Agrupación Operativa del Cesid coronel Juan Alberto Perote, y el teniente Pedro Gómez Nieto, a los que ahora se suma Roldán.

Perote declaró ante Garzón que informó a su jefe en el Cesid, el general Emilio Alonso Manglano, de que se iba a producir el atentado que costó la vida a Oñaederra un par de días antes de que se cometiese. Perote dijo que obtuvo la información de un topo que tenía en el cuartel de Intxaurrondo. También declaró que había informado a Manglano sobre, 61 inicio, de la guerra sucia días antes de que se realizase el secuestro de Lasa y Zabala. Perote dijo que la información se la había pasado su topo de Intxaurrondo.

Roldán fue preguntado ayer sobre todos los datos que tuviera acerca de Gómez Nieto, Dorado Villalobos y Felipe Bayo. Roldán, tras ser nombrado director general de la Guardia Civil, en 1986-1 reclamó a Gómez Nieto para que dirigiera un grupo de élite llamado Grupo Omega y conocido en los círculos de la Guardia Civil como los pata negra, que dependían del director y se encargaban de operaciones especiales antiterroristas.