Una empresa de tabaco admite en EE UU pagar indemnizaciones
La industria estadounidense del tabaco ha sufrido la pasada semana dos terremotos seguidos que la han sacudido hasta sus cimientos. Liggett, la quinta empresa en importancia, ha dinamitado un frente que se mantenía unido desde hace 50 años y ha abierto un precedente de consecuencias imprevisibles al admitir el pago de indemnizaciones por enfermedades atribuíbles al tabaco. El objetivo de Bennett LeBow, dirigente de Liggetts, no es ponerse al frente de una cruzada, antitabaco de la patronal, sino dar un golpe de mano en el grupo Nabisco y conseguir separar su división de tabaco, Reynolds, de la de alimentación.Liggett había dado la campanada el miércoles al liquidar, fuera de los tribunales, sus eventuales responsabilidades en una querella monstruo en la que cientos de miles de fumadores, representados por 60 despachos de abogados, acusan a las tabaqueras de manipular los niveles de nicotina para mantener la adicción.
El viernes, el grupo anunció el acuerdo con cinco Estados para cubrir los gastos en los presupuestos de salud pública por las enfermedades de los fumadores. Liggett pagará a cada uno de estos Estados un millón de dólares ahora y 440.000 dólares anuales en los próximos nueve años. La empresa ha aceptado además las normas de las autoridades sanitarias para impedir el acceso de los menores a los cigarrillos. Será un caballo de Troya en la estrategia de la industria del tabaco, porque intensificará las denuncias: si una empresa reconoce que el producto es perjudicial y paga por ello, ¿por qué no hacer pagar a las demás?.Golpe general
El volumen de negocios de Liggett en la industria del tabaco -un sector en el que se mueven 45.000 millones de dólares al año- es poco importante: las ventas de Chesterfield y otras marcas menos conocidas suponen sólo el 2% del mercado. Pero el golpe ha sido general: Philip Morris, la número uno, que controla la mitad de las ventas de cigarrillos en EEUU, perdió un 12 % de su valor en Wall Street entre el miércoles y el jueves, aunque luego tuvo una ligera recuperación.
Las indemnizaciones que Liggett cubrirá en los próximos 25 años suponen el 12 % de sus beneficios antes de impuestos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.