Los debates no interesaron a la mayoría
Los polémicos espacios electorales en televisión, sobre los que pivotó parte de la campaña electoral, interesaron a los ciudadanos menos que en los comicios de 1993. A falta de un cara a cara entre Felipe González y José María Aznar, Televisión Española organizó debates sectoriales con representantes de los seis grupos parlamentarios. PSOE y PP ocuparon atril en todos los coloquios políticos.lU, CiU, PNY y Coalición Canaria fueron rotando.Los cinco debates monógráficos fueron emitidos por La 2, la cadena de la inmensa minoría, que hizo honor a su eslogan. El más visto fue el dedicado a la economía. El coloquio sobre el empleo reclutó la audiencia más baja, en gran parte por culpa de la carga política que ese día llevaba TVE1. Cuando comenzó el debate en La 2, la audiencia estaba saturada con la doble ración de entrevistas a Aznar y González.
La audiencia media de los coloquios políticos ha sido inferior a los de la campaña para las legislativas de 1993. Fin el mal resultado influyó la hora de emisión, nunca antes de las once de la noche. Pedro Altares, que ejerció de moderador, admite la "dificultad" de los debates a cinco, que tienden a ser monopolizados por el PSOE y el PP.
"Pierden viveza por la necesaria distribución equitativa de tiempos y por la elección de los participantes, ya que son los partidos quienes los seleccionan", afirma Altares. El. PP envió a Rafael Arias Salgado a dos programas (dedicados a la economía y al bienestar social).
