Nueva bronca populista de Yeltsin a sus ministros por no trabajar por la noche
El líder ruso, Borís Yeltsin, propinó ayer un nuevo rapapolvo populista al Gabinete que dirige Víktor Chernomirdin y lamentó que las luces de los despachos gubernamentales estén ya apagadas por la noche, cuando abandona el Kremlin y pasa junto a la sede del Ejecutivo de camino hacia su casa.Yeltsin, en plena campaña electoral, está empleando a fondo el estilo llano que tan útil le fuera en el pasado y que hoy suscita opiniones controvertidas, ya que mientras unos lo consideran muy apropiado para la psicología del ruso de a pie, otros lo ven como pasado de moda y digno de un director de granja agrícola soviética.
"Antes, al volver del trabajo, hace aproximadamente un mes, a eso de las nueve o las diez de la noche, veía muchas ventanas de la Casa Blanca [la sede del Gobierno] iluminadas; ahora, al volver, veo que la mayoría de las ventanas están oscuras. Así es", dijo Yeltsin en una sesión especial que el Ejecutivo dedicó ayer a la situación económica. "No creo que sea una broma", señaló el presidente, tratando a los altos funcionarios del Gabinete como si fueran niños que no hacen sus tareas.
Las tareas que el presidente ha formulado en sus primeras manifestaciones preelectorales consisten en crear una mejora de las condiciones de vida que convenza a los rusos para votar a Borís Yeltsin como presidente el 16 de junio próximo.
La tarea es más complicada de lo que el presidente parece suponer cuando puso entre la espada y la pared a su Administración comprometiéndose a pagar en marzo los sueldos atrasados. El ministro de Finanzas, VIadímir Panskov, con el rostro crispado, soportó ayer en silencio la andanada de reproches que le hizo el máximo dignatario. "Le acusamos sobre todo a usted", dijo Yeltsin, refiriéndose al retraso de las nóminas y a los problemas para. recaudar ingresos presupuestarios previstos.Partskov manifestó ayer que el presupuesto había tenido que atender a gastos imprevistos, como un préstamo al fondo de pensiones, y que el nivel de recaudación de impuestos había descendido de un 13,4% del producto nacional bruto en 1994 a un 11% en 1995. Panskov dijo también que un total de 24 billones de rublos (aproximadamente 625.000 millones de pesetas o el equivalerte a la mitad del último crédito obtenido por Rusia en el Fondo Monetario Internacional) no habían ingresado en las arcas del Estado desde principio de añoEmpresarios investigados
Yeltsin anunció ayer que la Fiscalía del Estado investigará a los dirigentes de 76 empresas que tienen dinero en sus cuentas, pero no pagan el sueldo de sus trabajadores.
La estadística oficial registra el nivel más bajo de inflación desde que se, comenzó la reforma (un 2,8% duirante el mes de febrero, todavía por encima del objetivo del presupuesto de 1996, que es de un 1,9%). Los analistas, sin embargo, dudan que sea posible mantener una rígida política monetaria y de! estabilización financiera, tal como exige el Fondo Monetario Internacional, y satisfacer las necesidades sociales.
Guennadi Melikian, el ministro de Trabajo, dijo ayer que la inflación se había contenido a costa de la población y se había prolongado por más tiempo de lo que la gente puede soportar. según Melikian, el nivel real de los sueldos disminuyó un 24% en 1995 en relación a 1994, y el de las pensiones, un 19%.
Yeltsin prometió ayer que en el plazo de una semana promulgará un decreto sobre reforma agraria y se entrevistó también con el político liberal Yegor Gaidar. Éste expuso al presidente las condiciones de su partido, la Opción Democrática de Rusia, para apoyarlo en las elecciones presidenciales del próximo mes de junio. Estas condiciones incluyen la inmediata apertura de negociaciones de paz para poner fin a la guerra de Chechenia y el cese del ministro de Defensa, Pável Grachov, y de las figuras más "odiosas y antidemocráticas de su entorno". Gaidar consideró "equivocada e ilusoria" la opinión de Borís Yeltsin en el sentido de que no existe alternativa a su propia candidatura.
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