Una doble satisfacción

José María Aznar puede encontrar en Madrid una doble satisfacción: vivir en la capital de España el triunfo que le aseguran todas los sondeos y derrotar a su adversario inmediato, Felipe González, abriendo un auténtico abismo electoral de más de 25 puntos: 52,3% frente al 27%.El calvario madrileño de los socialistas prosigue con machacona crueldad. Voló el ayuntamiento en 1987, entregaron la Comunidad en mayo pasado y no parece que nadie pueda detener la sangría de votos.

Si los datos del sondeo se confirman, el PSOE podría perder hasta casi un 8% de los votos -prácticamente los mismos que ganaría el PP-, con lo que sus diputados se quedarían en nueve, frente a los trece actuales.

Con estos datos el PSOE, además de conseguir en Madrid los peores resultados de las seis elecciones generales celebradas hasta ahora -11 escaños en 1977 y 12 en 1979-, dejaría fuera al representante de la corriente Izquierda Socialista, Antonio García Santesmases, y a un candidato que siempre había conseguido escaño, como Javier Sáenz Cosculluela, hasta ahora diputado por la Rioja y que figura en undécimo lugar de la lista.

La tercera fuerza en discordia es IU, que aumentaría su voto en algo más del 4%, pero con un resultado final muy discreto que le otorgaría sólo un diputado más que en 1993. Uno de los más activos de la pasada legislatura, Diego López Garrido, quedaría sin escaño.