"La reforma educativa no tiene que dar miedo"

Unos 90.000 alumnos de sexto, séptimo y octavo . de EGB" de entre 11 y 14 años, tendrán que dejar sus colegios y mudarse en los próximos tres años a un instituto de bachillerato. Este cambio tiene alarmados a padres, profeso-res y alumnos. Sin embargo, quien, desde noviembre, lidia con la definitiva implantación de la educación obligatoria secundarla (ESO) es Soledad Iglesias, de 44 años, la nueva directora provincial de Educación.Pregunta. ¿Por qué protestan padres y alumnos?

Respuesta. Cualquier comienzo de la enseñanza nueva supone una incertidumbre para toda la población. Tienen que tener en cuenta que hay que adaptar unas construcciones que están hechas para EGB e institutos de bachillerato. También hay que adaptar el descenso de natalidad a la menor necesidad de colegios de enseñanza primaria. La implantación de la ESO supone una adaptación de la red de centros. Por una parte, ampliando las capacidades de los institutos, o fusionando dos colegios públicos. Esto supone el cambio de alumnos de un colegio a otro, pero ahí intentamos hacer que todo el grupo de alumnos y profesores se muevan juntos hacia el otro centro. La ESO implica una mejora de la enseñanza y en algunos casos un cambio, de, edificio Sería un cambio de ubicación. Eso, a los que le toca, les supone una mtranquilidad..

P. ¿Qué le falta al nuevo sistema educatiVo?

R. Consolidarse. Hay que conseguir que todos los centros. de primaria puedan contar con un especialista en lengua extranjera, música y educación física. Hay que adecuar la ratio Jefinitiva de los colegios, ampliar la oferta de la escolarización de los alumnos de tres años, desarrollar los departamentos de orientación en todos los institutos que comiencen la educación secundaria, que haya un psicólogo y un pedagogo que se unan al departamento de orientación. Por otra parte, hay que consolidar la formación tecnológica básica para los alumnos, que se incluye dentro de las enseñanzas obligatorias. Antes, esa enseñanza sólo la tenían los alumnos que elegían el camino de la formación profesional. El alumno que ahora formemos va a tener una formación polivalente, que además le permita-aprender, pero adaptándose a las necesidades del mercado de trabajo. La ESO no tiene que dar miedo.

P. Explique a los padres en qué consiste.

R. Yo les diría que supone una mejora en la calidad de la educación. Tienen que entender que el que el alumno a los 12 años pase al, instituto no es un verdadero problema. Si echamos la vista atrás, encontramos que, la mayor parte de los padres han' estudiado con unas enseñanzas que empezaban el bachillerato en los institutos a los diez anos, y ése no era el verdadero problema. La ESO supone una mejora en la atención de los alumnos, mucho más personalizada; unos currículos más adaptados a las edades de los alumnos, unas posibilidades de diversificación curricular que permitan la atención de los alumnos con unas necesidades educativas especiales. La formación profesional está adaptada al mundo del trabajo. Existe una disminución de la ratio de los alumnos, un aumento progresivo de las materias optativas a lo largo de la enseñanza secundaria y un departamento de orientación de los institutos que va atender a los alumnos. En líneas generales es una mejora clara de la calidad de la enseñanza

P. ¿Cuánto dinero invertirá el ministerio en la reforma de los institutos?

R. En la implatanción del primer ciclo de la ESO, 6.000 millones, que se distribuirán en la construcción en algunos institutos de nuevas unidades. Y en otros casos, en la adaptación de los actuales institutos para que puedan contar con la tecnología necesaria para impartir la nueva enseñanza. Por ejemplo, adaptar el aula de música y el de plástica en los institutos con equipamiento para niños.

P. Los padres también se quejan de la falta de profesores especializados en las asignaturas. de educación física, inglés y música.

R. Precisamente, el esfuerzo que se ha hecho en los últimos años ha sido conseguir profesorado especializado. El 6,5% cubre ya esas necesidades. Donde menor problema hay es en las ensenanzas de inglés y educación física. Ahí es donde estamos haciendo el esfuerzo para que aumenten estos colectivos de profesores especializados.

P. ¿Entre sus objetivos está que los niños de la región sean bilingües?

R. Me gustaría. Es necesario, debido a las demandas sociales y por las necesidades que genera el mercado de trabajo, que los niños aprendan además de la lengua castellana otro idioma. Desde luego que vamos a fomentar y ampliar la oferta de idiomas. Además del acuerdo firmado con el British Council para la implantación de la enseñanza bilingüe en 10 colegios, el próximo ano se empezará la enseñanza de Idiomas a los cuatro años en vez de a los ocho. El aprendizaje de idiomas es una necesidad real.

P. ¿Qué índice hay de fracaso escolar?

R. Ahora mismo estamos en una ampliación de la educación escolar hasta los 16 años. Es muy difícil hacer un balace si no se tiene una referencia del número de alumnos que se ha ampliado. La ventaja es que los chicos están dentro de un sistema educativo hasta los 16 años, con lo que se mejorará la condición de preparación de los alumnos. También hay una coincidencia de la salida de los centros educativos y las posibilidades de entrar en el mundo laboral.

P. ¿Cuál es el perfil del estudiante madrileño?

R. No es lo mismo un estudiante que vive en la zona rural que en la ciudad. La vida en la gran ciudad quizá les hace ser más activos, menos conformistas. Pero creo que el alumno madrileño es bastante responsable, se preocupa por los estudios y tiene ganas de superarse en su formación.