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Pulso en el Gobierno valenciano por la gestión de Teatres de la Generalitat

Manuel Ángel Conejero Regó a la dirección artística de Teatres de la Generalitat en septiembre. Empezó a gastar hasta que se encendieron todas las luces rojas y fue nombrado un gerente. En noviembre, se creó la empresa Directos Trullenque, SL, que ha canalizado más de 30 millones en publicidad de los teatros públicos y ha cobrado también por asesoramiento, decoración navideña y diseño de un logotipo cuyo autor es hijo de Conejero. Teatres de la Generalitat se ha excedido en unos 30 millones de su presupuesto. La tensión entre Conejero y el titular de Cultura de la Generalitat Valenciana, Fernando Villalonga, se ha convertido en un pulso político. Villalonga quiere destituirlo y el presidente, Eduardo Zaplana, no le deja.El administrador único de Directos Trullenque, SL, Javier Trullenque Pagatzaurtundua, dijo ayer que lleva 12 o 13 años como autónomo en el campo de la publicidad y que se decidió a crear una sociedad limitada cuyo registro se retrasó por problemas con el nombre. Concretamente, según comprobó este periódico en el Registro Mercantil, la empresa comenzó sus operaciones el pasado 9 de noviembre, dos meses después del nombramiento de Conejero como director artístico. Según el propio Trullenque, él y Conejero se conocen de hace años porque ya le llevó la publicidad del Palau de la Música cuando éste fue su director y lleva la publicidad del Oxford Center y de la Fundación Shakespeare, sociedades privadas vinculadas a Conejero.

Un 15% es la comisión que Trullenque afirma ganar con la contratación publicitaria. A través de su empresa, Directos Trullenque, SL, se han facturado, según fuentes de Teatres de la Generalitat, unos 30 millones de los 60 gastados por Conejero en publicidad, así como 2,5 millones por la decoración navideña del teatro Principal, que solía instalar con un coste mínimo la Diputación; unas 700.000 pesetas en concepto de personal de asesoramiento y 650.000 pesetas por el nuevo logotipo de los teatros públicos, que Directos pagó a su autor, Miguel Conejero, hijo del responsable artístico de Teatres.

El director artístico de Teatres de la Generalitat, Manuel Ángel Conejero, -cuya vinculación al organismo, por otra parte, es un contrato de prestación de servicios, ya que sigue cobrando y en activo como catedrático de universidad-, se siente respaldado en el insólito pulso que mantiene con el consejero de Cultura, Fernando Villalonga. El titular de Cultura ya se resistió a nombrarlo pero acabó cediendo a las presiones del presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, y de dirigentes del PP, a instancias de la directora del diario Las Provincias, María Consuelo Reyna.

La llegada de Conejero a Teatres de la Generalitat fue bien acogida en principio, dado su perfil de persona vinculada al sector. Sin embargo, sus decisiones en relación con la programación, la contratación para el Principal de La gata sobre el tejado de zinc, obra de la que es el autor de la versión, por el doble de su coste en otros teatros; su enfrentamiento con la consejería y su facilidad en el gasto han llevado a una fuerte crisis que, ayer mismo, era analizada en una reunión por los miembros de la Plataforma de les Arts Escèniques Valencianes y Villalonga.

La plataforma ha solicitado la inmediata destitución de Conejero. Pero esta decisión ha sido aplazada por indicación de Zaplana, al menos hasta después de las elecciones generales del próximo 3 de marzo.

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