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Los agentes de Protección Civil de Flix no tenían máscaras antigás en la fuga de cloro

Los encargados de tomar las medidas de emergencia para proteger a la población de Flix de la fuga de cloro de la planta de Erkimia, la noche del sábado, no disponían de equipos de protección personal como máscara antigás. Por ello el primer afecta do por la nube tóxica fue el concejal Marc Mur, encargado de poner en marcha el dispositivo del Plan de Emergencia Municipal. Mur y el joven Manuel Escribano, los únicos hospitalizados a raíz del accidente, fueron dados de alta en el Hospital Comarcal de Mora d'Ebre ayer por la mafiana y volvieron a sus actividades normales.

Ayer el Ayuntamiento de Flix analizó las deficiencias que dejó al descubierto el accidente, que no produjo ninguna desgracia personal por haber sucedido de noche y en invierno. La primera y más grave fue la falta de equipos de protección personal para los propios actuantes de Protección Civil, lo que puso en peligro no solamente a esas personas, sino a todo el operativo de seguridad que estaban desplegando.El concejal de Protección Civil de Flix estaba fuera del pueblo, por lo que el alcalde Antoni Sabaté llamó por teléfono a Marc Mur, que fue el primer concejal en actuar. Al salir del Centro de Coordinación Municipal (CECOPAL), pidió a un guardia municipal una máscara de respiración. "No tenemos", fue la respuesta, y tuvo que salir a cara descubierta. Casi una hora después los efectos del gas obligaron a trasladarlo al hospital. Las mediciones de los equipos de Protección Civil indican que, a la hora de la actuación, la máxima concentración de gas se produjo justamente en la zona del CECOPAL, hasta 20 ppm (partes por millón).

Después de la reunión de anoche, el Ayuntamiento acordó pedir que la planta de cloroformo de Erkimia, donde se produjo la fuga, no se ponga en marcha hasta que se hayan tomado medidas correctoras que aseguren que no se puede repetir un accidente de esta envergadura. El Consejero Delegado de Erkimia, Rafael Loste, declaró que la planta no volverá a producir hasta que se haya determinado exactamente la causa del accidente. El resto del complejo de Erkimia volvió a funcionar la misma noche del sábado.

La planta es de las más modernas de Erkimia, fue inaugurada en 1990, y la bomba donde se originó el fallo llevaba menos de tres meses funcionando. La empresa anunció ayer medidas para atenuar las consecuencias de una fuga de este tipo en caso de fallo de los equipos. Esta planta, a diferencia de las que fabrican y almacenan cloro en el mismo complejo, no contaba con sistemas automáticos de cortinas de agua para combatir las consecuencias de una fuga.

La mañana del domingo la Fiscalía de la Audiencia de Tarragona ya abrió diligencias para determinar si existen responsabilidades penales por el accidente.

Ayer el consejero de industria Antoni Subirá también anunció la posible participación de asesorías exteriores. La organización ecologista Greenpeace emitió ayer un comunicado volviendo a pedir el cierre de todas las plantas de productos clorados de Erkimia. Esta organización hace una campaña por el cierre de Erkimia, y todas las plantas que trabajan con cloro y/o lo producen, desde 1992. Para Greenpeace no se trata sólo de un problema de riesgo y seguridad industrial, sino del peligro y toxicidad de todos los productos clorados, tanto para el hombre como para el medio ambiente.

Ayer también se reunieron los responsables de los grupos operativos del dispositivo de Protección Civil de la Generalitat con el director del Plaseqta y delegado de la Generalitat en Tarragona, Josep Maldonado, para analizar lo actuado durante la noche del sábado. Su conclusión es que se actuó correctamente, que el Plan funcionó perfectamente.

El Ayuntamiento en cambio encontró más deficiencias, como el fallo de la emisora municipal. La noche del sábado se grabaron los avisos a la población y una entrevista con el alcalde, Antoni Sabaté, pero sólo se pudieron emitir por Catalunya Radio, porque una avería eléctrica la tarde anterior desconectó el emisor de la radio

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