Sampaio será el nuevo presidente de Portugal

El socialista Jorge Sampaio fue elegido ayer nuevo presidente de la República Portuguesa. Su rotunda victoria, con más de 7 puntos de diferencia sobre el ex primer ministro conservador Aníbal Cavaco Silva, desató la euforia de sus simpatizantes, que llenaron las calles de Lisboa de cánticos, banderas y fragor de bocinas. El sucesor de Mario Soares obtuvo el 53,83% de los votos frente al 46,170/1 de su rival, que anunció su retirada de la política. La elección de Sampaio abre un nuevo ciclo en Portugal, donde los socialistas han alcanzado todo el poder político, después de ganar claramente las pasadas elecciones generales del mes de octubre y gobernar los ayuntamientos de las capitales más, importantes del país. Sampaio prometió ser el presidente "de todos".

Jorge Sampaio afirmó anoche que "la estabilidad" marcará su mandato como máximo dignatario de Portugal y añadió que será "el presidente de todos los portugueses, con franqueza, capacidad de moderación y propician do consensos". El primer ministro portugués, el también socia lista Antonio Guterres, felicitó en nombre del Gobierno y en el suyo propio al nuevo presidente de la República, a quien. aseguró 1a total lealtad y la colabora ción del Ejecutivo". "Sé que el presidente Jorge Sampaio seguirá la tradición de Mario Soares como presidente de todos los portugueses y como referencia de consenso y estabilidad". El propio Mario Soares elogió anoche desde París la figura y trayectoria política de Sampaio y añadió que "la presidencia de la República está en muy buenas manos".

La jornada electoral transcurrió sin incidentes salvo el mal tiempo que presagiaba una mayor abstención que en convoca torias anteriores. Sin embargo, la participación de los portugueses en los comicios fue similar a elecciones anteriores, situada en torno un 67%. A falta de 6 centros electorales por escrutar debido a intentos de boicoteo, los datos oficiales difundidos anoche otorgaron al socialista Jorge Sampaio 3.038.418 votos (un 53,83%) frente a los 2.605.900 (un 46,17%) que obtuvo su rival.

La victoria, en un principio, parecía aplastante por los, sondeos difundidos por las televisiones nada más cerrarse los colegios electorales. No sería final mente tan abrumadora, aunque sí suficiente y rotunda. La televisión estatal (RTP) otorgaba a Sampaio entre un 56% y un 60% de los votos frente al 40%-44% que obtendría Cavaco. La cadena privada SIC situaba al socialista con un 59% de los sufragios y a Cavaco con un 41%, mientras la TVI, con capital de la Iglesia, colocaba al futuro presidente un 56,4% de los votos frente 43,6% del que se convertirá en el gran perdedor.

Confianza en la victoria

Durante la mañana de ayer, Sampaio expreso públicamente su confianza en la victoria, si bien precisó que se encontraba "un poco nervioso". "Sería una broma decir que no tengo ansiedad por conocer los resultados después de tanto tiempo", admitió el candidato de un partido que dominará la política portuguesa de aquí a final de siglo.Sampaio llegó a su colegio electoral, en la Escuela Marquesa de Alorna, pasadas las 11.30 horas acompañado por su mujer y sus dos hijos. Después de votar, Sampaio pronosticó "una alta participación a pesar de las extremadamente adversas condiciones climatológicas".

El ex primer ministro del PSD (Partido Social Demócrata), Aníbal Cavaco Silva, votó dos horas después que su todavía rival en la escuela de Bartolomeu de Gusmáo. No quiso pronunciarse sobre el resultado final y apeló a un masiva participación de los portugueses en las elecciones. El rostro de Cavaco Silva cuando llegó al hotel donde iba, a esperar el resultado del escrutinio presagiaba el anunciado fracaso en todos los sondeos difundidos en las últimas semanas. Era todo lo contrario a un Sampaio sonriente y seguro de sí mismo.

Antes, de conocerse datos oficiales, uno de los asesores electorales del ex primer ministro, Dias Loureiro, felicitó al candidato Socialista públicamente y reconoció la derrota de Cavaco. No existían dudas. A medida que transcurría la noche, las bocinas de los coches aturdieron el centro de Lisboa y los socialistas tomaron las zonas próximas al hotel donde Sampaio se dirigió a sus simpatizantes. La fiesta socialista acabó bien entrada la madrugada.

El que fuera candidato comunista para estas presidenciales, Jerónimo de Sousa, afirmó, a la salida de su colegio electoral, que el día de hoy -por ayer- iba a ser para él "divertidísimo". Por su parte, el también ex aspirante de extrema izquierda, Alberto Matos, expresó públicamente su deseo de que Samapaio fuera el sucesor de Soares.

El primer ministro portugués Antonio Guterres, que apoyó decididamente a su amigo Jorge Sampaio, aseguró que el próximo jefe del Estado continuará la labor de Mario Soares y será "factor de consenso y estabilidad" para la vida portuguesa.