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Un nuevo informe denuncia más abusos de niños en orfanatos chinos

Un grupo de derechos humanos habla de muertes y violaciones en Shanghai

El hoy "módelico" Instituto de Beneficencia de la ciudad china de Shanghai, destino de muchas parejas extranjeras para adoptar niños, pudo ser hasta 1993 un verdadero campo de exterminio para ellos, según un informe del grupo Human Rights Watch Asia, con sede en Nueva York. Niños muertos de hambre o frío, violados por sus médicos o enviados a manicomios sin motivo es el panorama que dibuja el documento, inmediatamente desmentido por el Gobierno chino.

El informe, conocido ayer, será presentado oficialmente el lunes, coincidiendo con la visita que hará un grupo de corresponsales extranjeros al orfanato de Shanghai. Su conclusión, en 331 páginas, es que miles de niños fueron condenados a morir de hambre o tratados con negligencia "criminal". Entre otros horrores, se narra que en 1991 murieron 15 niños en este centro en sólo tres días, nueve de ellos por hipotermia, tras dejarles más de 24 horas sentados en sus orinales, escasamente vestidos. y en condiciones de temperaturas extremas. También se habla de torturas, como colgar a los pequeños boca abajo con la cabeza sumergida en un barreño de agua. El material procede de Zhang SItuyun, un médico de 53 años que trabajó en este orfanato entre 1988 y 1993 y que abandonó China el año pasado con un importante número de documentos, historias clínicas e informes oficiales sobre las condiciones de la citada institución. Además se aporta el testimonio y las fotografías tomadas por Ai Ming, una interna que creció en el orfanato y también abandonó China el año pasado.El centro se describe como un ejemplo de cuartos de la muerte para bebés hasta 1993. El informe alega que los responsables del mismo ejecutaban una política, conocida como "resolución sumarial", mediante la cual se seleccionaba a los niños para eliminarlos por hambre con objeto de mantener estable la población de los orfanatos. Para ocultarlo, la dirección falsificaba las historias clínicas y justificaba las muertes por "malformaciones cerebrales congénitas". Si ésta fue la mayor causa de defunciones entre 1988 y 1989, la "desnutrición", fue la alegada con mayor frecuencia entre 1991 y 1992.

Las estadísticas sobre la mortalidad en los orfanatos proceden, según el grupo redactor del informe, de un documento oficial de 1990 del Ministerio de Asuntos Exteriores de China que fue encontrado casualmente en la mayor librería, sobre temas asiáticos fuera de este país. Y según los datos, el número de niños que fallecieron en estas instituciones ese año equivale a un tercio del total de la población infantil internada y a más de la mitad de los que ingresan cada año. Los índices de mortalidad en algunos orfanatos provinciales chinos llegaron en 1989 al 72%, casi el doble de los registrados ese año en los conocidos orfanatos de la muerte de la Rumania de Ceaucescu.

El informe ha sido elaborado por Human Rigths Watch, que se presenta a si misma como una organización independiente establecida en 1978 para la defensa de los derechos humanos en todo el mundo y Financiada sólo por fondos privados.

Sus redactores han pedido a los periodistas extranjeros que pregunten al antiguo director de la institución, Han Weicheng, que suele guiar las visitas, sobre el paradero de la niña Chou Hui, trasladada en 1989 a un manicomio y en 1992 a una cárcel, tras afirmar que el doctor Han la había violado. O por qué fue clasificado como secreto un informe de 1991 en el que se preguntaban las causas del elevado número de muertes por causas no naturales en este centro.

Éste es el cuarto informe internacional sobre los orfanatos chinos desde 1993. Las autoridades chinas se apresuraron ayer mismo a calificarlo de propaganda antichina. "El informe no tiene ningún fundamento y su único objetivo es dañar la imagen de China", dijo un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.

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