"Lo que está pasando en Francia va a ocurrir en toda Europa"

Fundador del semanario francés Le Nouvel Observateur en 1964, Jean Daniel, de 69 años sigue siendo escritor antes que periodista. En su último libro, Viaje al fondo de la nación, destaca el conflicto entre identidad nacional y vocación universal en una Francia que se diluye en Europa. ''Una parte de la opinión pública francesa, sobre todo en periodos de recesión económica, ve su identidad vagamente amenazada por el miedo a una disolución en Europa, a dejar de ser franceses; el temor a la hegemonía económica alemana, y un vago terror a que una presencia masiva de inmigrantes musulmanes pueda modificar el paisaje cultural en algunas regiones". Pero ante todo, Daniel advierte que Francia está ahora a punto de experimentar un giro histórico: el declive del Estado Providencia o del Bienestar. "Los beneficios del Estado del Bienestar dan a los ciudadanos franceses un sentimiento de seguridad que ahora cuestiona el nuevo Gobierno [gaullista], a pesar de que sus propuestas no son forzosamente irreparables. Algunas de ellas son incluso buenas".El director de Le Nouvel Observateur define la actual oleada de huelgas como "un reflejo defensivo, emocional y apasionado, irracional contra las agresiones al Estado del Bienestar, de las que el Gobierno es un torpe instrumento: hace falta una prolongada labor de pedagogía para explicarlas".

Para sus compatriotas también hay un claro mensaje de censura: "Los franceses se han sentido plenamente satisfechos durante los últimos 30 años. Han sido el pueblo más feliz de la Tierra, unos niños mimados y, de repente, se han dado cuenta de que viven más años, que tienen que cuidarse más y consumir más medicamentos. Y que la Seguridad Social sufre un déficit".

El análisis de Daniel resalta la paradoja de que los mismos ciudadanos que piden en las encuestas que se ponga fin a las huelgas expresan su simpatía hacia los huelguistas. "Hay una interesante contradicción que muestra que, algo nuevo está ocurriendo, y lo que está pasando en Francia va a ocurrir en toda Europa. El giro está siendo muy brusco".

Malestar europeo

En el fondo de este malestar europeo se halla el sobresaltado proceso de unión política y económica. "Puede que no se cumplan los plazos para la moneda única, pero al final, de todas formas, Europa se hará; aunque lleve más tiempo de lo previsto".

En conclusión: Daniel sostiene que las dificultades actuales no deben conducir hacia el cinismo y el pesimismo: "La idea de Europa es formidable. Se trata de la decisión de países libres, no de Carlomagno ni del Sacro Imperio, ni de Hitler o Napoleón. Que se produzca un retraso no es razón para caer en un europesimismo que me parece histéricamente ridículo. ¿Qué son unos años frente a una visión a largo plazo?".