Tres disminuidos psíquicos acusan a vecinos de su pueblo de haberles violado durante años
Cuatro hombres de la localidad de Peñafiel están ya en la cárcel por esta denuncia
Al principio, el joven de Peñafiel de 20 años, disminuido psíquico se dejó hacer a cambio de veinte duros. Después unos cuantos hombres del pueblo, según la de nuncia presentada, le empezaron a pedir más y a someterle a él y a otros dos hermanos, también deficientes, a diversas vejaciones sexuales. Las presuntas violaciones llevan produciéndose en Peñafiel (Valladolid) desde hace tres años. Cuatro hombres de la localidad ya están entre rejas. La policía investiga, además, a otra veintena de vecinos por estar supuestamente implicados en los mismos delitos.
Fuentes municipales de Peñafiel, una población de 7.000 habitantes a 60 kilómetros de Valladolid, han confirmado que al menos otras siete personas más pueden pasar a declarar en los próximos días sobre estas agresiones sexuales. La Delegación del Gobierno en Castilla y León ha indicado, por su parte, que las investigaciones se están efectuando entre 18 vecinos de la localidad, al tenerse la sospecha de que pudieran haber cometido actos similares con las tres víctimas.Los cuatro detenidos, cuyas iniciales son A. A. M., de 41 años; J. O. G., de 36; K R. G., de 2 1; y J. J. A. D., de 22, reconocieron hace días en la Audiencia Provincial vailisoletana haber mantenido relaciones sexuales con los tres hermanos.
Según la denuncia presentada, son los presuntos responsables de violar por vía anal y bucal a los citados hermanos, a los que ahora está, reconociendo el médico forense. En declaraciones a la agencia Efe, el juez que lleva el caso, José Luis Calama, señaló: "Los hechos están claros y no descarto que el número de personas que pasen a declarar por el juzgado sea mayor".
En bodegas y descampados
Fuentes del Ayuntamiento de Peñafiel informaron ayer que la Guardia Civil de la localidad recibió a mediados de noviembre la denuncia de la madre de las víctimas, de 61 años, que estuvo acompañada de su hijo de 20 años y de otro de sus hermanos. Los dos disminuidos psíquicos supuestamente violados pertenecen a una familia de siete hermanos, cuyo padre, peón caminero, falleció en 1994, al parecer, víctima del alcoholismo.
Los hechos relatados en la denuncia se han venido produciendo, según diversos testimonios, de forma repetida y a lo largo de casi tres años en descampados, coches, bodegas particulares y en otras zonas de las afueras de este pueblo, que se sitúa en el corazón de la ribera del Duero.
El sistema utilizado para acceder sexualmente a las víctimas fue en un principio el de invitar al joven de 20 años a dar una vuelta por las afueras de Peñafiel y después realizar, individualmente o en grupo, prácticas sexuales, que iban desde la sodomización a la penetración bucal y otros abusos de toda índole. Al parecer, esas agresiones sexuales, fueron consentidas en su inicio por la principal víctima, que recibía a cambio 100 pesetas. Después, según varios testimonios, las cantidades fueron subiendo, si bien las vejaciones también se produjeron con un hermano y una hermana algo mayores que el denunciante y también deficientes mentales.
La familia de las víctimas sobrevive con la pensión de su madre, que completa trabajando como empleada de hogar. El denunciante es un joven muy conocido en Peñafiel, ya que ha trabajado de forma esporádica en varios establecimientos de hostelería de la localidad.
Varios vecinos de Peñafiel han relatado que en más de una ocasión la principal víctima había contado en lugares públicos del pueblo sus actividades sexuales con vecinos de la villa, pero nadie, debido a su deficiencia psiquica le prestaba atención.
Félix Martín, alcalde de Peñafiel desde los últimos comicios municipales, manifestó ayer su "repugnancia por este tipo de acontecimientos" y no descartó que, una vez, que hayan finalizado las actuaciones judiciales, el Ayuntamiento se persone como acusacion particular en el caso.
La localidad vallisoletana de Peñafiel fue hace un año escenario de otro truculento suceso: el intento de agresión dé vecinos del pueblo a un importante número de miembros de la comunidad gitana, tras una pelea entre un payo y un gitano en un bar de la localidad.
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