Mayor Zaragoza defiende la educación permanente como factor de equidad

El director general de la Unesco, Federico Mayor Zaragoza, dijo ayer en Madrid que la educación ha de dejar de ser "algo que se ofrece a algunos en algún momento de su vida" para pasar a ser "algo que se ofrece a todos permanentemente". Mayor Zaragoza intervino en la sesión de clausura de la X Semana Monográfica de la Fundación Santillana, dedicada al análisis de las, reformas educativas con el horizonte de un desarrollo sostenible. Reformas que, según su director, Ricardo Díez Hochleitner, requieren "permanencia" y, para ello, la óptica de "los temas de Estado".

El director general de la Unesco argumentó que la única manera de garantizar la equidad que se persigue con la generalización de la educación a todos, a pobres y ricos, es asegurando que también todos reciban ese bien permanentemente, a lo largo de toda la vida. Sólo así, en opinión de Mayor Zaragoza, podrá evitarse que la educación sea, paradójicamente, un factor de exclusión.La necesidad del carácter permanente de la educación ha estado presente como una idea constante en la X Semana Monográfica. Albert Sasson, director de la Oficina de Estudios, Programación y Evaluación de la Unesco, dijo que hoy todos los países hablan constantemente de reformas en sus sistemas educativos, pero se preguntó hasta qué punto la idea de reforma no debería ser precisamente un elemento esencial del propio proceso educativo en una sociedad que, como la actual, está en proceso permanente de cambio.

Reformas estables

La misma idea late en el documento base para los trabajos de la semana, elaborado por su, director, Ricardo Díez Hochleitner, quien preconiza la necesidad de reformas ".estables", lo que exige el acuerdo de los agentes sociales y políticos implicados en el sistema educativo. Ello significa entender la planificación de la educación, y de sus reformas, desde una "perspectiva de Estado", al margen de contiendas electorales y partidistas.Continuidad, permanencia, pero también evaluación periódica; objetiva, y permanente. Países como Suecia están aún hoy retocando y perfilando aspectos de una reforma de su sistema educativo que se emprendió hace ya treinta años, circunstancia de la que ha dado testimonio uno de sus pricipales artífices de dicha reforma, Torsten Hussén, uno de los ponentes en esta X Semana.

Otro aspecto subrayado por los expertos es la necesidad de apostar abiertamente por la incorporación de las nuevas tecnologías para el apoyo del aprendizaje. Curiosamente los investigadores de la educación que han intervenido en este encuentro -celebrado en la sede de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI)- han hablado más, mucho más del aprendizaje que de la enseñanza. El propio Federico Mayor Zaragoza, subrayó este punto de vista en su conferencia. "Anteponer el aprendizaje a la enseñanza significa una educación cada vez más participativa y menos frontal". Es en este sentido en el que se insiste en la utilización "prudente" de las tecnologías aplicadas a la educación. Serán útiles siempre que contribuyan a (lar mayor protagonismo en el proceso educativo al alumno.

Pero los sistemas educativos, con o sin reformas, se plantean en función de un modelo . determinado de desarrollo y no debería valer cualquier modelo. Enrique Ipiña, ex ministro de Desarrollo Humano de Bolivia, propuso cambiar la visión antropocéntrica" del mundo, en la que el hombre se comporta como un amo despótico del universo por una "visión cosmocéntrica", y en tal sentido, mucho. más humana. Tal visión supone que el hombre trabaja sobre el Planeta convencido de que los bienes de los que somos usufructuarios no son nuestros y debemos trabajar para mejorarlos, en modo alguno destruirlos, pensando en las generaciones futuras.

La educación es, también en este aspecto, esencial. Mayor Zaragoza resumió esta idea citando a Herbert G, Wells: "La historia se convierte cada vez más en una carrera entre la educación y el desastre"