Tina Turner incluye Barcelona en su próxima gira europea

Blandiendo una pistola de oro y enfundada en un traje-pantalón de terciopelo negro de Azedine Alaia, ayer Tina Turner presentó en París un doble acontecimiento: la aparición de su disco Goldeneye, con el tema estrella de la última aventura de James Bond, y el anunclo de una gira -la primera desde hace seis años- que la llevará, entre el 3 de mayo y el 27 de septiembre de 1996, a trece países europeos distintos. Las ciudades escogidas para los conciertos son las, siguientes: París, Nancy y Lyon, en Francia; Gante, en Bruselas; Rotterdam, en Holanda; Munich, Bremen, Hamburgo, Hannover, Colonia, Karlsruhe y Berlín, en Alemania; Barcelona (Palau Sant Jordi, el 18 (le septiembre), en España; Estocolmo y Goteborg, en Suecia; Oslo en Noruega; Copenhague, en Dinamarca; Viena, en Austria, Edimburgo, Gateshead, Cardiff, Sheffield y Londres, en Reino Unido, y Milán y Bolonia, en Italia."Estoy contenta de emprender una nueva gira", dijo Tina Turner, "porque cada ciudad te proporciona un sentimiento diferente, en cada caso la comunicación con el público es distinta. Eso es aún más evidente cuando cambias de país a menudo, tal y como sucede en Europa". La carrera profesional de la cantante, muy vinculada al éxito popular obtenido en Gran Bretaña, ha acabado por instalar a Tina en Suiza, cerca de Zúrich: "Ahí vivo muy bien, muy tranquila. Paso mi tiempo entre Suiza y el sur de Francia, sigo practicando el budismo, que me proporciona la energía espiritual que necesito. El budismo es energía, el cuerpo necesita alimentarse pero el espíritu también".

James Bond

Tina Tumer cantó para las cámaras.el tema de James Bond, presentó un vídeo que resume una carrera de 40 años y 60 millones de discos vendidos e hizo una demostración apabullante de profesionalismo a la americana, recordando que su aportación al filme de Bond. "nace de una fiesta en casa de Jack Nicholson"; celebrando que los Rolling Stones "vuelvan al rhythm and blues"; mostrando un educado escepticismo sobre el retomo de los Beatles -"yo era una gran admiradora de John Lennon, creo que era el mejor"-, y aceptando de buen grado, pero sin dar pie al chafardeo, una pregunta sobre qué opinaba de las declaraciones televisadas de Lady Di: "Me parece que ha hecho lo que tenía que hacer". Y sonrió a la audiencia desde sus exuberantes y vitales 56 años.