Javier Vilató inaugura su primera retrospectiva de pintura cubista

Javier Vilató (Barcelona, 1921), sobrino de Pablo Picasso, inauguró ayer en Madrid su primera exposición retrospectiva, integrada por 68 óleos. La inauguración se convirtió en una fiesta de la familia Picasso, ya que varios miembros de la numerosa familia del pintor se encuentran en Madrid estos días por motivos relacionados con la obra de su famoso pariente: la donación de obra a la ciudad de Málaga, la retirada del cristal que protege el mural Guernica y la adquisición de cuadros del pintor por parte del Ministerio de Cultura.

En las salas de exposiciones de Telefónica, en la Gran Vía madrileña, había el miércoles por la noche al menos diez parientes de Picasso. La más conocida era Christine, viuda de Paulo (el hijo que Picasso tuvo con la bailarina rusa Olga Koklova) y que tiene la intención de donar una parte importante de su colección personal a la ciudad de Málaga. Christine tiene previsto entrevistarse la próxima semana con el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, para rematar la operación. Con Christine estaba su hijo Bernard, de 36 años, quien estos días ha visitado el Reina Sofía para conocer cómo se exhibirá el mural Guernica. Los demás eran primos y sobrinos en diferente grado de relación del pintor.Ninguno de ellos quiso hablar de la operación Picasso hasta que no esté cerrada. Ni tampoco de los problemas que Christine ha tenido para donar a Andalucía su valiosa colección. Todos preferían hablar de los óleos cubistas de Vilató y de la excelente relación que éste mantuvo siempre con Pablo Picasso.

Bernard, el más extravertido de todos ellos, alabó la forma en la que el Reina Sofía mostrará el Guernica: "El cristal simbolizaba el miedo al fascismo, y ahora se podrá contemplar con la misma seguridad pero sin barreras".