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Los observadores españoles niegan el triunfo de Obiang

Alfonso Armada

"La impresión, general de los observadores internacionales fue la de una victoria clara de la oposición en la mayoría, de los distritos". La afirmación,que desmiente el triunfo electoral que Teodoro Obiang se atribuyó en las elecciones municipales celebradas el 17 de septiembre, está contenida en el informe elaborado por los dos únicos observadores españoles, Eugenio Burgos y Leonardo Marcos. El informe, que acaba de ser remitido al Ministerio de Asuntos Exteriores español, es un relato pormenorizado de las "numerosas dificultades" que el Gobierno de la ex colonia, española urdió para entorpecer el control de los conucios.La carrera de obstáculos empezó en cuanto los dos observadores -ambos funcionarios del Ministerio de Justicia e Interior- desembarcaron en Malabo, una semana antes de que se abrieran las,urnas. El Gobierno guineano trató a los observadores de forma individual, como enviados de "gobiernos amigos", lo que limitó sus posibilidades de actuación. Eso les impidió planificar las tareas a realizar y fijar el número de testigos necesarios para todo el país. Además se suscitaron serias dudas sobre la imparcialidad de muchos de los observadores presentes, dada su "relación de parentesco y/o amistad con las autoridades".

Otro aspecto fundamental, que se recoge en el informe, fue la "imposibilidad de fijar libremente los distritos que debían visitar cada uno". Las "condiciones impuestas" por, el régimen, que convocó las primeras municipales democráticas merced a la fuerte presión internacional, fueron consideradas "inaceptables" por los observadores. En vista de eso, anunciaron a la Embajada española su posible retirada; ya que con las trabas evidentes ".resultaba imposible una actuación eficaz"..Sin embargo, la Embajada les hizo ver la necesidad de realizar la misión.

En sus conclusiones, los observadores establecen qué tanto las mesas electorales como las juntas dependían, del Gobierno guieano, lo que impedía "su consideración como órganos independientes". Además, reseñan la ocultación del censo hasta el día de las elecciones y su "manipulación por las autoridades". Según Burgos y Marcos, "se observaron multitud de irregularidades (propaganda, presencia de autoridades y de mili tares en los colegios, no utilización de la tinta indeleble por orden oficial, voto múltiple) cometidas en todos los casos por miembros del PDGE [Partido Democrático de Guinea Ecuatorial, el partido de Obiang] y por funcionarios y .autoridades". A ello hay que añadir que "no se permitió la presencia de observadores internacionales en la Junta Electoral Nacional para comprobar el escrutinio definitivo. Frente a los datos de los interventores de la oposición, que se daban la victoria en 20 de 27 poblaciones, Obiang proclamó el triunfo de su partido en 18 alcaldías.

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