El monóxido de carbono en el aire aumenta las cardiopatías

El monóxido de carbono que contamina el aire en las ciudades incrementa las enfermedades del corazón, especialmente en las personas mayo res, según un estudio hecho sobre los datos de siete ciudades norteamericanas. El estudio aparece en el Diario americano dé salud pública y ha sido dirigido por un equipo del Centro de Epidemiología, Medioambiental de Wisconsin.Casi el 6% de las admisiones hospitalarias debidas a infartos o crisis cardiacas, según el estudio, puede atribuirse al monóxido de carbono procedente de los escapes de los motores de vehículos. Los datos estadísticos fueron recogidos entre 1986 y 1989 en las ciudades de Filadelfia, Chicago, Detroit, Milwaukee, Los Ángeles, Houston y Nueva York. Se estudió también la posible repercusión de otros componentes, como dióxido de sulfuro, ozono y dióxido de nitrógeno, pero ninguno de ellos resultó directamente vinculado a problemas cardiacos.

El monóxido de carbono es un gas inodoro que dispara la posibilidad de un fallo cardiaco, impidiento a la hemoglobina el transporte del oxígeno a los tejidos. Los vehículos son actualmente la fuente del 90% del monóxido de carbono en las ciudades y del 50% de la contaminación del aire.

Existen parámetros para todo. el territorio de EE UU sobre la exposición de las personas a elementos contaminantes que determinan cuáles son los límites máximos que pueden recibir sin que provoquen síntomas nocivos tales como vértigos y fatiga.

Niveles nocivos

Diverso s estudios realizados hasta el momento sugieren que ni mucha gente enferma sin necesidad de, que se sobrepasen esos límites oficiales. Así, la, nueva investigación encontró un aumento de los ingresos hospitalarios, incluso cuando los parámetros de contaminación se encontraban a niveles inferiores de los considerados como nocivos.En la presentación del estudio, el doctor Joel Schwartz, de la Escuela de Salud Pública de Harvard, señala que, aunque la proporción de afectados es relativamente pequeña, está claro que el riesgo medioambiental de contaminación por monóxido de carbono es elevado. En su opinión, debería profundizarse en la investigación para que la Agencia de Protección del Medio Ambiente pueda revisar sus ordenanzas sobre las emisiones de monóxido de carbono, en caso de que se confirme su repercusión en las enfermedades del corazón.