El crecimiento económico se estanca en el 3,2% en el segundo trimestre por la debilidad del consumo

La economía española creció a una tasa anual del 3,2% en términos reales durante el segundo semestre de 1995, según los datos de la Contabilidad Nacional publicados ayer. Este crecimiento, interpretado como una "virtual estabilización del ritmo de crecimiento de la actividad", en versión de Economía o como "el final del despegue económico", según los más pesimistas, está basado en el crecimiento de la inversión (9,6% en tasa anual). Fuentes del Gobierno explicaron a EL PAÍS que "los indicadores económicos muestran que la desaceleración del crecimiento se mantendrá durante el tercer trimestre, pero volverán a darse tasas de aumento del PIB en torno al 3,5%, pasados dos o tres trimestres".

La economía española creció a una tasa anual del 3,2% en el segundo trimestre de este año, con un aumento intertrimestral del 0,7%. Esto es lo que dicen las cifras de Contabilidad Nacional, conocidas ayer. También dicen que este ritmo de crecimiento es consecuencia de una fuerte aceleración de la demanda interna (3,4% frente al 3,1% registrado en el primer trimestre) y una aportación negativa del sector exterior (-0,3 puntos). A su vez, el crecimiento de la demanda interna está basado en el fortísimo crecimiento de la inversión (9,6% en términos interanuales) y contribuye, con 2,1 puntos al crecimiento del PIB.En los componentes de la inversión, la formación bruta de capital fijo en construcción crece a tasas del 9,8% -dos puntos más que en el trimestre anterior-, mientras que la inversión en Bienes de Equipo mantiene una tasa de crecimiento del 9%. Estadística afirma que, en bienes de equipo, estamos ante "máximos cíclicos para algunos productos", como maquinaria, estructuras metálicas, maquinaria agrícola y tractores.

Una de las cifras más llamativas es la de consumo privado. En el segundo trimestre creció a una tasa anual del 1,8%, una décima menos que en el primero. Los coyunturalistas oficiales entienden que la recuperación del consumo se está demorando de forma extraña. La interpretación de esta frialdad consumística es que la moderación salarial y la falta [todavía] de expectativas economicas mejores en los ciudadanos son obstáculos importantes para consumir.

Este punto provocó ayer un amago de polémica entre el ministro de Trabajo, José Antonio Griñán, y el secretario de Estado de Economía, Alfredo Pastor. El ministro aseguró en el Senado que la tasa de crecimiento en el segundo semestre era "una buena noticia". En respuesta a Pastor, quien había atribuido el bajo consumo a la inestabilidad en el empleo, explicó este pulso mínimo por tres factores: moderación salarial, desempleo y mayor ahorro familiar.

El sector exterior tuvo una aportación negativa debido a un aumento fuerte de las importaciones (11,7%), superior al de las exportaciones(11,4%). Desde el lado de la oferta, se aprecia una desaceleración. de la industria y una fuerte recuperación de la construcción. El crecimiento del Valor Añadido Bruto (a precios de mercado) en construcción subió el 9,1%, 2,1 puntos más que en el primer trimestre.

La agricultura y la pesca sufrieron una severa recesión, con tasas negativas del 6,7% debido a los problemas climáticos.

Polémica en ciernes

Los datos de Contabilidad Nacional del segundo trimestre provocaron ayer una gama amplísima de opiniones, encontradas casi todas. Pedro Solbes, ministro de Economía, explicó que la tasa de crecimiento del periodo "es una buena cifra que permite seguir manteniendo un alto crecimiento del empleo", y explicó la debilidad del consumo por "una mayor propensión al ahorro".El Instituto Nacional de Estadística es tajante en su interpretación: "Este resultado [crecimiento del 3,2% del PIB en el segundo trimestre] confirma la virtual estabilización del ritmo de crecimiento de la actividad y corrobora que se h a alcanzado un máximo en la actual fase expansiva del ciclo".

En esta línea, se oyeron las primeras voces de alarma sobre el hipotético "fin del despegue económico". Juan Iranzo, uno de los miembros del Grupo de Expertos, aseguró que a partir de ahora, el PIB subirá en tasas algo superiores al 3%". En la, misma onda se explicó Julio Alcaide. A las interpretaciones pesimistas se sumó CC OO: "El ritmo de crecimiento de la economía ha tocado techo".